Seguramente has notado que en los últimos años se han vuelto populares los emprendedores o entrepreneurs. Si no lo sabías, deberías salir de la cueva en la que has estado viviendo. 🙂
Si ya sabes bien que es un emprendedor, o incluso, eres uno de ellos, sáltate la siguiente sección.
Para los recién salidos de la cueva
Una definición sencilla: un emprendedor es el dueño de una empresa en pañales. La empresa es la que está en pañales. Bueno, es muy probable que también el emprendedor.
La tendencia últimamente ha sido relacionar a los emprendedores con empresas altamente innovadoras, auto-suficientes y centradas en crear “más con menos”.
Quizás las características más importantes que debe tener un emprendedor para aumentar sus probabilidades de éxito son la pasión y la disciplina. Debe apasionarse principalmente por dos cosas:
- Debe sentirse apasionado por emprender en sí. Debe estar dispuesto a correr riesgos, a ser persistente, constante, tenaz en alcanzar sus objetivos, etc. Debe ser amante de la innovación y de la mejora continua. Tanto en lo personal como en su empresa.
- Debe sentirse apasionado por sus objetivos. Si la empresa que desea echar a andar no le apasiona, le resultara muy difícil correr riesgos por ella. Seguramente preferirá utilizar su tiempo el algo más interesante. Será muy difícil que sea persistente, constante, tenaz, etc.
Bien. Suficientes explicaciones. Ahora vamos al punto importante.
¿Cuál es la relación entre los Emprendedores y la Economía Personal?
Emprender es una forma de inversión. Inviertes tu tiempo, conocimiento y en algunas ocasiones, dinero. Digo que en algunas ocasiones porque el dinero no siempre es un factor crítico para iniciar una empresa. Especialmente en este tiempo en que la tecnología juega un papel muy importante en la vida de muchas personas y es cada vez más accesible. Esto lo convierte en una opción muy accesible si quieres comenzar a invertir pero no tienes suficiente dinero para utilizar otros instrumentos financieros que te pagan intereses o dividendos (por ejemplo, compra de acciones, inversiones a plazo fijo, bienes inmuebles, etc.)
En lo personal, considero que una de las preguntas más importantes que te debes hacer como emprendedor es: ¿Quiero mantenerme a cargo activamente de esta empresa o prefiero que alguien más la administre activamente mientras yo descanso en una hamaca tomando daiquirís?
Las posibles respuestas (y la motivación de cada una de ellas) son un tema suficientemente amplio como para escribir otra entrada. Y lo haré. Pero lo que en este momento me interesa, es mostrarte que crear una empresa que te genere ingresos es una forma más de diversificar tus fuentes de ingresos y asegurar tu Libertad Financiera.
Crear una empresa plantea riesgos sustancialmente diferentes de los riesgos de otros tipos de inversión. Por ejemplo, cuando inviertes en fondos de inversión o compras acciones o utilizas cuentas bancarias, no tienes una incidencia directa en las actividades que se están llevando a cabo para generar intereses. Esto es opuesto a una empresa en la que tú mismo puedes ser el que toma las decisiones importantes y por lo tanto, el riesgo de cometer errores está prácticamente en tus manos.
Como los riesgos de ser un emprendedor son diferentes, también los retornos o beneficios que obtendrás de tu inversión son diferentes. Es casi seguro que si creas una empresa, el factor económico será una gran motivación y recibirás la mayor parte de tus retornos en forma de beneficios económicos. Sin embargo, gran parte del retorno será en forma “no monetaria”. Por ejemplo, saber que estás contribuyendo a la economía de tu país por medio de tu empresa; o dando un excelente servicio a tus clientes; o creando productos/servicios de calidad que tienen un impacto real en otras personas de tu comunidad. Todos estos beneficios forman parte del “retorno de tu inversión” aunque no sean precisamente dinero. Y también son parte de tu Economía Personal.
Comencé a relacionar claramente estos dos temas, porque la semana pasada asistí a la Séptima Convención de Emprendedores Landivarianos y al Primer Congreso de Formadores de Emprendimiento organizados por la Universidad Rafael Landívar de Guatemala. En este evento participaron varios expertos en el tema de diferentes países de latinoamérica. Anoté más de 5 páginas en mi cuaderno con ideas y reflexiones sobre la conferencia y estaré publicando una (o varias) entradas al respecto en los próximos días. Si este tema te interesa, probablemente te podrás beneficiar de las ideas que quiero compartir.
[Actualización: Puedes ver la entrada sobre la convención aquí.]
Yo me considero un “emprendedor en pañales”, lo cual es algo redundante según mi propia definición de emprendedor pero es bastante cercano a la realidad. De hecho, este sitio es en sí un “emprendimiento” – como dicen los que saben. 😉
Conclusión y petición especial
En conclusión: Iniciar una empresa es una opción más de inversión que puede darte un empuje en tu caminata hacia la Libertad Financiera. Los retornos que recibirás por tu empresa son esencialmente diferentes de los que recibirías con inversiones más “tradicionales”. ¿Mejores o peores? Eso depende de, entre otras cosas, tu pasión y disciplina. Definitivamente escribiré más sobre este tema.
Ahora, me gustaría saber si entre ustedes, estimados lectores, existen emprendedores. Si eres uno de ellos, déjanos saber ¿Cuáles son las lecciones que has aprendido en este camino? ¿De qué forma ha cambiado tu economía personal al iniciar una empresa? Si no eres un emprendedor todavía, ¿Que preguntas tienes sobre ser emprendedor e iniciar empresas? Deja tus pensamientos plasmados es un comentario. Todos te lo agradeceremos.
Y por favor… que alguien me cambie ya el pañal.