¿Naciste para ser Millonario?

La semana pasada So de Blog&Lana escribió un artículo titulado “No todos estamos hechos para ser millonarios“. Como el título sugiere la conclusión final es que no toda las personas tienen lo que se necesita para ser millonarias.

En este artículo, expondré con más detalle las razones por las que no estoy de acuerdo con todas sus afirmaciones (aunque algunas sí me parecieron muy atinadas).

La Pregunta Equivocada

Primero, preguntarte si naciste o no para ser millonario/a no es constructivo. Tú naciste con las posibilidades de ser y hacer prácticamente cualquier cosa que quieras. Así que primero deberías preguntarte qué es lo que realmente quieres de la vida, y luego actuar de acuerdo a tu respuesta.

Y esto es verdadero para muchas áreas de tu vida, no sólo las finanzas. En tus relaciones, debes saber qué es lo que buscas en otra persona y luego actuar de acuerdo a tu respuesta. Cuando quieres hacer deporte, te preguntas qué deportes son los que disfrutas y luego actúas de acuerdo a tu respuesta.

Preguntas Diferentes

Así que, en lugar de preguntarte si naciste o no para ser millonario, quiero ofrecerte otras preguntas que pueden ayudarte a tomar decisiones satisfactorias.

Primero, hablando de ser millonario ¿qué significa ser millonario? ¿cómo se ve? ¿se trata simplemente de tener más de un millón de unidades de tu moneda local? Para mi, ser millonario es, en primer lugar, diferente de “ser financieramente libre”. Y esto es algo en lo que también coincido con el artículo mencionado. Si simplemente llegaste a una posición financiera en la que tus gastos están asegurados por un tiempo prácticamente indefinido (por medio de negocios, inversiones, bienes raíces, etc.) no necesariamente eres una persona millonaria. Además de ser financieramente libre, ser millonario significa tener, de forma sostenible, mucho dinero extra, que no es necesario para subsistir.

Esa cantidad de dinero debería ser medida en millones, pero debido a las diferencias de moneda en el mundo 1 millón no es más que un número arbitrario. Es más fácil conseguir un millón de Quetzales, la moneda de Guatemala, que un millón de Euros. Pero el número no es lo importante, sino que se cumplan las 3 condiciones: mucho dinero extra, que no es absolutamente necesario y una forma sostenible de obtener ese dinero.

Una vez que sabes qué significa realmente ser millonario deberías preguntarte ¿realmente quiero ser millonario? ¿es algo que me motive? y para responder a estas preguntas debes hacerte preguntas de más alto nivel, y un poco más difíciles de responder como ¿para qué quisiera ser millonario? ¿cuál es el propósito? Por la naturaleza profunda de estas preguntas, las respuestas no están relacionadas sólo con tus finanzas. El propósito por el cual estás vivo y las cosas que valoras de la vida son las que guían todos los ámbitos de tu vida, incluyendo tus finanzas y economía personal.

Gustos vrs. Metas

Es importante que te hagas estas preguntas, porque cuando ya sabes que sí quieres es ser millonario y tienes un propósito para hacerlo, entonces tomas las decisiones que tienes que tomar para cumplir tu meta. Si tus respuestas te indican que en realidad no te interesa ser millonario y que no encuentras ningún propósito adecuado para hacerlo, entonces decides enfocarte en otras metas. Pero eso, no significa que no hayas nacido para ser millonario/a. Tampoco significa que nunca tendrás un millón de unidades de una moneda en particular. Tampoco significa que no te gustaría tener un millón aunque no sea una meta que persigues activamente.

Muchas personas deciden no ser millonarios sin analizar profundamente sus deseos y sus propósitos. Viven su vida sin haber sido millonarios porque nunca tomaron la decisión de buscarlo como una meta y disfrutar el camino (con sus cosas buenas y malas).

Otras personas deciden no ser millonarios habiendo analizado profundamente sus deseos y propósitos. Viven su vida sin haber sido millonarios porque tomaron la decisión de no buscarlo y disfrutar su propio camino (también con sus cosas buenas y malas).

De las personas que decidieron no ser millonarios hay quienes, dada la oportunidad de recibir una gran cantidad de dinero y convertirse en millonarios, no la rechazarían. Pero eso es, para ellas, algo que les gustaría tener, mas no una meta específica que se hayan trazado.

Conclusión

En conclusión, si tu quieres ser millonario, creo que las preguntas que debes hacerte son: ¿por qué quieres ser millonario/a? ¿cuál es el propósito? ¿ser millonario complementa el propósito general de mi vida? ¿o sería un obstáculo? ¿lo que te motiva a querer ser millonario es miedo a no tener suficiente? ¿o es un deseo de contribuir más de lo que podrías contribuir si no fueras millonario/a?

Una vez que tomas tu decisión, cualquiera que sea, debes desarrollar las habilidades que se necesitan —nadie nace sabiendo como hacerse millonario— y disfrutar el camino.

Sin Hogar pero con Propósito

Hace un buen tiempo leí una serie de relatos sobre un hombre que decidió vivir en la calle voluntariamente para reducir sus gastos al absoluto mínimo. La mayor parte del tiempo durmió en un parque, aunque algunas veces dormía en el apartamento de un amigo. Tenía algunas pertenencias que guardaba en un lugar seguro y tenía una casilla postal donde recibía correspondencia. Trabajaba en el parque o en la biblioteca. En total únicamente vivió de esta forma durante unas cuantas semanas antes de mudarse a otra ciudad para vivir con su hermano.

Actualización: Lamentablemente el sitio donde estaban los relatos ya no existe. Así que quité los enlaces.

Sin embargo, en sus relatos se puede observar que todo el tiempo (o la mayoría del tiempo) mantuvo una actitud positiva con respecto a los problemas que tuvo que enfrentar debido a su situación. En el fondo, él sabía que era una situación temporal y que saldría adelante.

¿Qué puedes aprender de esto?

Creo que la lección más importante se puede resumir con la siguiente gráfica:

Sin Hogar, con Propósito

Una de las formas más populares de explicar esta gráfica es la famosa frase “el dinero no trae la felicidad”. En otras palabras, tu actitud puede —y debe— ser independiente de tus circunstancias externas. Si no es así, todo el tiempo tendrás subidas y bajadas de ánimo cada vez que la situación se torna difícil o fácil.

Otro aspecto interesante de esta gráfica es que puedes ver que es mucho más fácil subir por el eje de la riqueza si estás del lado derecho. Y puedes cambiarte al lado derecho en cualquier momento, no tienes que esperar a ser millonario. En el libro El Hombre de la Riqueza, trato con mucha más profundidad estas dos posibles formas de relacionarte con el dinero.

¿Qué estás esperando? Cámbiate al lado derecho, tenemos galletas.

Cómo Mantenerte Motivado para Mejorar tu Economía Personal

¿Has comenzado a ahorrar o pagar tus deudas pero después de unos días sientes que no vale la pena tanto esfuerzo? ¿O sientes como que no estás avanzando y para qué preocuparse tanto? mejor gastar tu dinero hoy y ser feliz, ¿no? Luego vas, cometes errores y al siguiente días sientes culpa.

Cuando intentas alcanzar metas difíciles cuyos resultados no son visibles rápidamente es muy fácil perder la motivación y caer de nuevo en los malos hábitos. En este artículo, comparto una excelente forma de mantenerte al pie del cañón en tu batalla. Es realmente sencillo,  sólo necesitas unos 10 o 15 minutos al día.

El Diario de los Halagos

Hace apenas unos cuantos días —ojalá lo hubiera conocido hace varios años— comencé a utilizar una técnica llamada “El Diario de los Halagos“. Básicamente consiste en que al menos una vez al día, en un lugar privado, te halagas a ti mismo/a. ¡Así de simple! Puedes hacerlo en un diario, un documento en tu computadora, etc. Lo más importante es que es 100% privado. ¡No puede verlo ni tu pareja ni tus hijos ni tu abogado!

¿Por qué habría de funcionar algo así?

Piensa en la persona más presumida que conozcas. Tú sabes, esa persona que siempre llega contándote que en sus vacaciones en Europa conoció a Paris Hilton (aunque en realidad, sólo la vio de lejos) o que su automóvil último modelo tiene más funciones que Excel… ya sabes quién.

Ahora, lo que nos interesa de esa persona no son las cosas que presume o por qué lo hace. Lo que nos interesa analizar es lo que está sucediendo en su mente al momento de presumir. Cuando tú presumes ante otras personas —porque acéptalo, algunas veces también tú lo haces— buscas desplegar un mayor valor social ante las demás personas. Buscas ser admirado/a. Y se siente bien, ¿no? Se siente bien saber que otras personas te admiran porque eso te demuestra que tienes valor.

Por supuesto, si todo tu valor como persona se deriva de ser presumido/a, tienes otro tipo de problemas; pero esa sensación de valor que obtienes te motiva. Te inyecta de energía y optimismo sobre lo que eres capaz de ser y hacer. Y precisamente el problema que queremos solucionar hoy es ¡mantenerte motivado/a cuando ya no tienes ganas de seguir ahorrando o limitando tus gastos para mejorar tu economía personal!

Ahora, de regreso en tu diario lo que debes hacer es presumir sobre todas las cosas buenas que has hecho hasta ahora para mejorar tu economía personal. Al hacer esto, estarás halagándote a ti mismo/a y presumiendo sobre lo increíblemente genial que eres por haber llegado hasta este punto. Y por otro lado, como la primera condición es que es 100% privado no estarás alimentando tu ego por la aprobación de los demás sino que estarás alimentando tu autorespeto y autoestima.

¿Resististe la tentación de comprarte un helado? Escríbelo. ¿Resististe la tentación de invitar a todos tus compañeros del trabajo a un helado? Escríbelo. ¿Es el tercer día seguido en el que trabajas sin distracciones en tu nuevo negocio? ¡Escríbelo! Muchos de tus avances por sí solos no parecen ser gran cosa, pero si los ves todos juntos en tu diario, bajo una luz positiva, ¡te motivarán a seguir adelante!

Esta es una herramienta muy útil para lograr, prácticamente, cualquier objetivo que te propongas. Es muy fácil perderse en la rutina y olvidar que tienes objetivos a largo plazo que escogiste conscientemente un día que tenías la mente clara. Pero este ejercicio también es fácil de recordar:

  1. Se presumido/a
  2. En privado

Ahora ve y escribe que eres increíblemente genial porque hoy leíste un fantástico artículo sobre cómo mejorar tu economía personal. 😉

Grupo de Apoyo para tu Economía Personal

Una excelente forma de cambiar el rumbo de tus finanzas es por medio de un grupo de apoyo. No tiene que ser nada sofisticado. Es simplemente una reunión de amigos o una llamada telefónica cada cierto tiempo con personas que compartan tus objetivos. El objetivo de estas reuniones es crear un ambiente que te permita alejarte de las influencias que te mantienen atado a deudas, un empleo mediocre o malos hábitos de gastos y reemplazarlos con impulsos positivos hacia tus objetivos.

La semana pasada tuve la oportunidad de reunirme con tres personas que tienen mucha más experiencia que yo en los negocios. Entre ellos, Mario Archila fundador de una empresa fuera de lo común llamada Prisma Humano. Luego de la reunión, me sentí energizado y con muchas más ideas para aplicarlas a Economía Personal y otros proyectos. Ese es el tipo de impacto que buscas en un grupo de apoyo.

¿Cuáles son los beneficios de un grupo de apoyo?

Responsabilidad

Participar activamente en este tipo de relaciones, te permite comprometerte más con tus objetivos. Por una parte, si los objetivos son comunes o similares pueden ayudarse directamente unos a otros para alcanzarlos. Por otra parte, para muchas personas es importante tener alguien con quien desarrollar un compromiso de cumplir ciertas tareas para ejercerse presión y cumplir.

Nuevos Puntos de Vista

Uno de los beneficios más evidentes de participar en un grupo de apoyo es que te expones a puntos de vista diferentes al tuyo. No necesariamente tienes que buscar personas que piensen igual que tú. De hecho, las diferencias de opiniones son las que te ayudan a crecer y mejorar tus criterios. Por supuesto, esto no significa que aceptes ciegamente todo lo que otras personas te digan. Sino que debes estar abierto a nuevas posibilidades que se ajusten a tus propios principios y objetivos.

Con un grupo de apoyo puedes compartir ideas sobre posibles negocios, recomendarse entre sí formas de obtener ofertas o descuentos para reducir tus gastos o incluso ayudarte a conseguir un nuevo empleo.

Nuevos Contactos

Las personas que conozcas en un grupo de apoyo pueden abrirte las puertas para conocer nuevas personas con quienes también podrías entablar relaciones productivas. Estas nuevas conexiones pueden desembocar luego en socios para negocios, clientes, proveedores o simplemente nuevos puntos de vista que te ayuden a alcanzar tus metas.

Ofrecer Algo En Retorno

Por supuesto, el apoyo en estos grupos es mutuo. Por lo que participar en ellos te permite contribuir con tu propia experiencia, conocimientos y puntos de vista para el crecimiento de las demás personas. En muchas ocasiones, el simple hecho de compartir tus experiencias es un beneficio para ti mismo porque refuerzas tus conocimientos.

Ten en cuenta que muchas de tus experiencias, aunque no lo parezcan, pueden ser de gran ayuda para otras personas. Es común que para uno las experiencias no sean tan relevantes, pero cuando tomas en cuenta que los puntos de vista y experiencias pasadas de otras personas son diferentes a las tuyas, se abre la posibilidad de que algo que tú consideras habitual sea una lección reveladora para alguien más.

Conclusión

En conclusión, un grupo de apoyo puede darte el empuje necesario para sobrepasar muchos de los obstáculos que encuentras cuando quieres hacer cambio importantes en tu vida.

¿Te gustaría iniciar algún grupo de apoyo para negocios o finanzas personales? O si ya participas en alguno, ¿Cuál ha sido tu experiencia? Recuerda que no tiene que ser algo estricto y formal. Muchas veces tu grupo de amigos es tu mismo grupo de apoyo sin que te des cuenta.

Actitud Hacia los Problemas

Todos tenemos problemas, pero más importante que eso es cuál es nuestra actitud frente a ellos, porque eso determina si podremos sortearlos o no.

Imagina a un amigo que quiere lograr un objetivo. Su objetivo podría ser reducir sus gastos, aumentar sus ingresos o conseguir una novia. Cualquier cosa. Lo importante es que el sabe que encontrará algunos obstáculos en el camino.

Por otro lado, podría ser que tu amigo está en una situación suficientemente problemática sin estar buscando alcanzar ningún objetivo en particular. Quizás está hundido en deudas, o no disfruta su empleo.

En cualquier caso, como todos los demás, tomará una decisión: ¿se quejará por los obstáculos, se sentirá miserable y no hará nada? ¿O utlizará sus recursos para intentar sortear los obstáculos?.

En otras palabras, puede decidir ver sus problemas como obstáculos que debes evitar a toda costa o como oportunidades de crecimiento.

Esta decisión, algunas veces tomada inconscientemente, es la que determinará el resultado final.

Una forma sencilla de determinar cuál es tu actitud general hacia los problemas es hacerte la siguiente pregunta: ¿qué haces la mayoría de las veces cuando tienes mucho tiempo libre? ¿buscas algún tipo de gratificación instantánea/momentánea? (ver una película, leer noticias, comer un helado, etc.) ¿O buscas algún reto que resolver? (escribir una historia, hacer ejercicio, buscar una forma de hacer helados bajos en calorías, etc.)

No quiero decir que dejes de ver películas y dediques todo tu tiempo a resolver problemas de cálculo. A menos que eso sea lo que te apasiona. Pero puedes comenzar a desarrollar la destreza de resolver pequeños problemas, por ejemplo jugar sudoku, ordenar tu casa, lavar tu automóvil todas las semanas, aprender algunas recetas nuevas. Esto te proporcionará confianza y te energizará para seguir con problemas cada vez más complejos. Hasta que finalmente puedas resolver tus grandes problemas.

Por supuesto, esto también aplica a tus esfuerzos poner en orden tu economía personal.

Cuando leí por primera vez el famoso libro “Por qué los pensadores positivos obtienen resultados poderosos” de Norman Vincent Peale, lo único que recordé de todo el libro fue una historia donde Norman le dice a un amigo que el único lugar donde las personas no tienen problemas es en el cementerio. Todos queremos menos problemas, pero no queremos morir para lograrlo. La alternativa es verlos como oportunidades y disfrutar el camino.

¿Puedes llegar a disfrutar tus problemas?

Ocuparte de tu Economía Personal es Egoísta

Te ocupas de tus Finanzas Personales, buscas formas de no gastar de más tu dinero, buscas formas de mejorar tus ingresos. ¿No te parece algo egoísta?

Además, ¿para qué quieres el dinero? Para pagarte unas vacaciones. Para trabajar menos. Para comprarte una casa más grande y tener más comodidades, ¿no?

Egocentrismo vrs. “Egoísmo Racional”

No estoy seguro de que mi uso de estos términos esté de acuerdo con los psicólogos, pero me servirán para establecer una diferenciación. Estoy siendo egoísta con el uso de las palabras. 🙂

¿Qué tan simple es para una persona responder a una pregunta como la primera de este artículo? Preocuparte por tus finanzas y tu bienestar en general es, de hecho, egoísta. Y la palabra egoísta puede tener connotaciones negativas. Lo que puede hacer que te sientas mal por perocuparte tanto por ti mismo, habiendo tantos problemas en el resto del mundo, ¿verdad?

¿Cómo te atreves comprar una pizza para tu familia cuando hay niños muriendo de hambre en África? ¿Cómo puedes irte de vacaciones a un hotel 5 estrellas cuando tu dinero podría utilizarse para encontrar una cura para el cáncer?

Existen varios conceptos relacionados con el egoísmo: Egoísmo Ético, Egoísmo Moral y Egoísmo Racional. Si discutiéramos cada uno de ellos, podríamos tardar horas. Sin embargo, destilaremos todos estos conceptos en uno sólo: Egoísmo Racional. En pocas palabras, el Egoísmo Racional es un interés natural de persecución de tus propios intereses y objetivos.

Si tienes 5 años puede ser que tus intereses y objetivos sean que tu mamá de te una galleta ¡YAAAAA! (¿Escuchaste mamá?) Y no te preocupa si es un buen momento para pedirla. De hecho, según algunos psicólgos, el cerebro de un niño de 5 años aún no tiene capacidad para comprender por completo que existe un punto de vista aparte del suyo. Eso se llama Egocentrismo. Cuando una persona se preocupa por su propio interés y nada más.

¿Qué pasa con tu Economía Personal?

Cuando te ocupas de reducir tus gastos, aumentar tus ingresos, invertir para el futuro, etc., puedes hacerlo tomando en cuenta tu propio interés y nada más; o puedes hacerlo entendiendo cómo funciona el dinero en la sociedad y proporcionar un valor real a otras personas.

Entonces, ¿es egoísta? Sí. Pero eso es normal.

Puede ser dificil de ver, pero tu trabajo, aunque no esté directamente relacionado con salvar a niños en África, puede tener un impacto positivo en la sociedad. Quizás tu trabajo te da los recursos para criar hijos responsables que sean quienes finalmente encuentren una cura para el cáncer. Cuando vas de vacaciones a la playa, estás soportando las fuentes de empledo derivadas del turismo. En donde quizás esté ahora trabajando el próximo Albert Einstein.

No lo puedes saber, pero si estás proporcionando valor a la sociedad, el impacto neto es positivo.

Un Tema Profundo

Por supuesto, como todos los temas que involucran psicología, finanzas y niños de 5 años pidiendo galletas, aún hay mucho por decir.  Sólo basta con mencionar el clásico dilema para seguir hablando del tema: Cuándo una persona realiza un acto “completamente desinteresado” como por ejemplo, ayudar a una anciana a cruzar la calle, ¿por qué lo hace? ¿porque lo hace sentirse bien consigo mismo/a? ¿Eso no es un acto “interesado”? 😉

Excelente Ejercicio para mejorar tus Finanzas Personales

Es hora hacer ejercicio. Pero esta vez, será diferente al ejercicio del que hablé hace unos días. Esta vez, será ejercicio de verdad. Te prometo que esto tiene un objetivo, así que por ahora, sigue las instrucciones y luego verás de qué se trata.

Preparación

Para este ejercicio necesitarás:

1. Un lugar abierto donde puedas saltar. El jardín de tu casa, el estacionamiento, etc.
2. Una cuerda de saltar. Si no, tienes simplemente recuerda: 10 centímetros de altura.
3. Opcional, un reloj que marque segundos o un cronómetro.

¡A Saltar!

Este es un ejercicio realmente simple. Lo que tienes que hacer ahora es intentar saltar 50 veces (con la cuerda, o levantando ambos pies 10 centímetros del piso) en el menor tiempo posible. Si tienes un cronómetro puedes utilizarlo para saber cuánto te tardaste exactamente. O para medir el tiempo de tus amigos y ver quién lo hizo mejor.

Ahora, ¡ve y salta!

Vamos, hazlo, es importante que no sigas leyendo hasta que hayas saltado. Cuando termines los 50 saltos, ven inmediatamente a seguir leyendo, pero no antes.

Resultados

Voy a confiar en que no estás leyendo esto sin haber saltado primero. 🙂

Ahora que realizaste el ejercicio, olvídate del tiempo que te tardaste en saltar las 50 veces. En realidad, eso no es lo que quiero que observes.

En este momento, quiero que le pongas atención a tu respiración. Si, a tu respiración. ¿Cómo es? ¿Agitada? ¿Normal? ¿Desigual? ¿Todavía respiras, verdad?

¿Que “#$%@ tiene que ver esto con mi Economía Personal?

(La palabra oculta es “rayos”)

Respirar. Es algo que haces, probablemente, todo el tiempo. Sin embargo, tu cuerpo está programado para que lo hagas sin tener que ponerle atención. Puedes poner atención y modificar tu respiración si así lo quieres, pero el resto del tiempo está en “piloto automático”.

Cuando hiciste los 50 saltos, ¿tomaste consciencia sobre tu respiración? La mayoría de personas no lo hacen. Si lo hiciste, seguramente es porque practicas deportes frecuentemente o estás entrenado para hacerlo de alguna otra forma. Sin embargo, es casi seguro que al concentrarte en hacerlo lo más rápido posible, olvidaste respirar adecuadamente.

Lo mismo, exactamente, puede pasar con nuestras finanzas personales. ¿Estamos realmente conscientes de nuestra situación financiera o está en “piloto automático”?

Lo mismo, exactamente, puede pasar con cualquier otra área de nuestra vida.

Entrenamiento

¿Qué hacer entonces para tomar consciencia de nuestras finanzas personales? ¿Que harías si quieres aprender a saltar 50 veces sin que tu respiración de descontrole? Practicar.

Comenzar con 10 saltos, luego 15, luego 20, 25, etc. Hasta lograr la meta.

De la misma forma, puedes cambiar hábitos costosos gradualmente. O iniciar tus ahorros con un pequeño porcentaje e ir aumentando. O cada día leer un artículo nuevo sobre finanzas personales en EconomiaPersonal.com 😉

Autoestima y Economía Personal

Para fines de este artículo, definiré autoestima como el conjunto de creencias y emociones que una persona asocia consigo misma.

Por ejemplo, alguien se cree capaz/incapaz de lograr algo. Alguien se siente frustrado/emocionado con su desempeño en una actividad.

El autoestima de una persona tiene un impacto directo en su economía personal:

  • Una baja autoestima (creencias o emociones negativas) puede afectar las actividades diarias de una persona, incluyendo las actividades que proporcionan valor a otras personas.
  • Si las actividades productivas se ven afectadas, el retorno (ingresos) de la persona, pueden verse afectadas también.
  • Una baja en los ingresos de una persona, puede causar una baja autoestima, principalmente por las emociones que se pueden asociar a la situación.

En otras palabras:  Baja autoestima afecta la productividad. Baja productividad afecta los resultados. Malos resultados afectan al autoestima.

Lo que necesitamos entonces es encontrar una forma de romper este círculo vicioso.

Podrías intentar mejorar tus resultados aplicando técnicas de concentración, ignorando el problema o tratando de darle una solución a los síntomas (drogas antidepresivas, cafeína) u otras distracciones. Pero esto no tendrá resultados duraderos porque el problema sigue estando ahí.

Entonces, ¿de qué forma puedes romper el círculo?

Jack Canfield popularizó hace años una ecuación que muestra la forma en que un evento puede tener impacto en nuestra vida. La ecuación es “E+R=O” que significa “Event (evento) + Reaction (reacción) = Outcome (resultado)”

Esta ecuación nos muestra que en cualquier interpretación que le demos a un evento — el resultado— hay un componente que prácticamente no podemos afectar —el evento en sí mismo— y otro que sí podemos controlar —nuestra reacción.

Utilizando esta forma de pensar, podemos romper el ciclo cambiando la forma en que interpretamos nuestra situación y así cambiando las emociones que surgen de ellas. Estas emociones, al final de cuentas son las que reflejan cómo nos sentimos acerca de nosotros mismos. Son las que pueden comenzar a hacerte sentir mejor.

Una vez que tu autoestima está en su lugar, estarás en una mejor posición para tomar acciones que corrijan tus resultados. Obtendrás buenos resultados, lo cuales mejorarán tu autoestima.

Ganar Dinero Haciendo Apuestas

En ocasiones anteriores he escrito que la forma ideal de obtener ingresos es proporcionar valor a otras personas que, idealmente, estén dispuestas a pagarte a cambio.

Sin embargo, hoy quiero escribir sobre una aproximación diferente para obtener dinero que no necesariamente involucra proporcionar valor a alguien, pero que tampoco necesariamente te proporciona ingresos: las apuestas.

Como podrás haber notado, me gusta clasificar cosas, así que no haré excepción con las apuestas. Hay dos tipos apuestas:

Apuestas donde no tienes ningún control

En todas las apuestas tienes control sobre la cantidad de dinero que vas a apostar. Pero en este tipo de apuestas, eso es lo único que puedes controlar.

Me refiero a las apuestas basadas en resultados de eventos en los que no participas directamente, por ejemplo: deportes, elecciones o concursos de belleza. A menos, claro, que seas deportista, candidato/a o bello/a.

En esta categoría también están las máquinas de juegos al azar, bingo, juegos de cartas, etc.

En estos casos puedes utilizar experiencias anteriores, estadísticas y corazonadas para intentar obtener ganancias. Sin embargo, existen algunas técnicas que puedes utilizar para reducir la probabilidad de perder. Desde hace un tiempo sigo un blog de uno de los lectores que precisamente se dedica a explorar esta forma de obtener ingresos. La lectura es bastante interesante, especialmente si eres de los que piensa que no hay mucho que aprender al respecto.

Apuestas donde tienes control sobre algo

Hay otro tipo de apuestas en las que puedes controlar algo más que la cantidad que vas a apostar. Generalmente son apuestas que surgen por un reto o algún juego de azar que involucre un poco de habilidad.

Por ejemplo, si tú y un amigo apuestan $100 en un juego de tenis. Lo que definirá el ganador no será únicamente la suerte. A menos, claro, que los dos sean muy malos jugando tenis y todo el juego se reduzca al azar.

Otro ejemplo: podría ser que luego de ganarte en el tenis, tu amigo apuesta contigo sobre quién sabe se sabe más capitales de los países del mundo. O quién recuerda mejor los diálogos de una película.

¿Deberías hacer apuestas?

Para mí, la regla de oro para las apuestas es: No apuestes lo que no estés dispuesto a perder. Simple. Si te da igual perder el dinero, puede ser una experiencia divertida. Pero si no te da igual perder $10, $100 o tu casa, entonces NO apuestes.

Seguramente habrás escuchado de personas que se vuelven adictas a las apuestas y que terminan perdiendo todo lo que tenían. Si hacer apuestas se ha vuelto un hábito y te causa problemas, es hora de dejarlo. Busca ayuda profesional si es necesario. Y no digas que hacer muchas apuestas es un problema sólo si apuestas todos los días. Hacer apuestas es un problema, si causa problemas.

En lo personal, me gusta hacer apuestas ocasionales porque me resulta divertido, pero nunca consideraría que las apuestas fueran mi principal fuente de ingresos. Puede ser divertido, pero no encuentras oportunidades para apostar todos los días, por lo que no serías sostenible. Aparte, no siempre encuentras personas dispuestas a aceptar los retos.

¿Tú deberías hacerlo? Al final, la decisión es tuya. Apuesto a que tomarás la decisión correcta.

¿Tienes problemas de dinero? Responde estas 13 preguntas

Ayer So, del blog Blog&Lana publicó 13 preguntas que las personas con problemas de dinero odian. Luego la sección de comentarios se transformó en una muy buena conversación acerca de los gastos personales y las diferentes perspectivas sobre el dinero de muchas personas.

Me sentí motivado a responder las preguntas yo mismo, porque mi situación actual es bastante peculiar para mi. Nunca había estado en una situación como la que estoy y no estoy seguro de cómo describirla.  🙂

Aquí están mis respuestas:

1. ¿Cuánto dinero gastas al mes?

Mi nivel de gastos actual es bastante bajo. Únicamente tengo gastos fijos y muy pocos “caprichos”.

2. ¿En que lo gastas?

Gimnasio (38%), Celular e Internet (36%), Depósito a cuenta de plazo fijo (18%), Transporte y otros (8%).

El depósito a la cuenta a plazo fijo es un arreglo que tengo con un familiar para pagar un préstamo de hace tiempo.

3. ¿En qué te lo quieres gastar?

Aparte de mis gastos actuales, en ahorro para inversión y clases de Aikido 🙂

4. ¿Eres rico?

No… todavía.

5. ¿Qué significa ser rico para ti?

Financieramente, significa que mis ingresos pasivos superen mis gastos, con un margen suficiente para re-invertir. Podríamos decir que es la definición de “riqueza” según Robert Kiyosaki.

Sin embargo, creo que la “riqueza” incluye otros factores no tan relacionados con las finanzas como el bienestar físico, mental, emocional y espiritual.

De cierta forma, para mi la riqueza financiera únicamente tiene sentido si el fin es soportar el resto de las áreas de mi vida.

6. ¿Y cómo le hiciste para pagar ese ipod, carro, etc.?

Me endeudé… bastante 🙂

Afortunadamente en este momento ya mis deudas fueron reducidas a 0.

7. ¿Cuánto ahorras por mes?

En los últimos dos meses: 0.

Antes de eso, era empleado y durante los últimos 7 u 8 meses de empleo ahorraba más del 40% de mis ingresos.

Esto necesita un poco de aclaración: Tengo la fortuna de ser suficientemente joven para vivir todavía con mis padres 🙂

Por lo tanto, hay gastos que no tengo que cubrir todavía. En este momento soy desempleado y estoy trabajando en varios proyectos propios. Los gastos que mencioné en las preguntas 1 y 2 los cubro con los ahorros que logré obtener de mi empleo.

8. Siempre estás pensando en cortar gastos mensuales ¿porqué no lo haces?

No, no siempre pienso eso. En este momento no quiero reducir mis gastos, ¡quiero aumentar mis ingresos! 🙂

9. Siempre te quejas de la falta de dinero, pero ¿te has puesto a leer de finanzas personales?

Me confieso culpable, a veces me quejo. Pero luego regresa mi sanidad mental y me doy cuenta de que quejarse no sirve de nada.

¡Y sí leo sobre finanzas personales! Por eso también tengo un blog sobre el tema 😉

10. ¿Cuánto debes en tus tarjetas de crédito?

0 (cero).

Utilizo una tarjeta de crédito para pagar el gimnasio y el celular, pero lo pago todo cada mes.

11. ¿Cuándo fue la ultima vez que dijiste “No” cuando alguien te pidió prestado?

Esto no ocurre muy seguido. Y la última vez que ocurrió dije que sí. Fue para un buen amigo y era un “prestamo por conveniencia”: quería aprovechar una oportunidad y necesitaba el efectivo. Tenía ya un cheque a su nombre, pero no había sido liberado.

12. ¿Cuánto dinero tienes ahorrado?

14+ meses de gastos personales.

13. ¿ A qué edad piensas retirarte?

Nunca.

Yo no creo en la idea de “dejar de ser productivo, mudarme a una casa de campo y ver atardeceres.”

Sí quiero la casa de campo y ver los atardeceres, pero no dejar de ser productivo, a menos que sea una necesidad física.

Si vemos el retiro como “dejar de trabajar por necesidad y hacerlo por gusto”, ya estoy retirado. Me gusta lo que hago.

Encontré estas preguntas en un buen momento porque justamente me estoy enfocando en darle un toque más personal al sitio. Después de todo se llama Economía Personal 🙂

Aparte de estas preguntas, agregué una página con información Acerca de Economía Personal en donde comparto más información sobre mi.

Ahora, tu turno. ¿Cuáles serían tus respuestas a estas preguntas? ¿Cómo te hacen sentir? ¿Cuáles serían los pasos más simples e inmediatos que podrías tomar para mejorar tu situación financiera?