¡Ve Pues! No me alcanzó la quincena

¡Hoy estoy de visita en otro blog!

¡Ve Pues! es un excelente blog de temas cotidianos escrito por Mynor con quien, entre otras cosas, compartimos la fascinación por la astronomía y el espacio!

Desde hace tiempo le debía una colaboración en su blog y decidí escribir sobre 7 principios sobre finanzas personales que he aprendido, en su mayor parte, por las malas. 😉

Así que sin más preámbulo, te invito a leer el artículo y conocer este blog!

Presupuesto Personal para Freelancers

Hoy continúo pagando mis deudas con los lectores. A Colo le debía algo específico sobre cómo hacer un presupuesto cuando tus ingresos son variables. Tal es el caso de los freelancers opuesto al caso de un empleado que recibe un salario fijo.

La solución es bastante intuitiva, que probablemente ya hayas considerado y que seguramente ya haces en otras áreas de tu vida.

Por ejemplo, cuando ves un video en YouTube si tu conexión es rápida simplemente le das play y lo ves sin problemas. Pero si tu conexión es lenta y la reprodución del video va más rápido que la carga, te toca… verlo… con… pausas… y… es… des… es… pe… rante.

¿Qué haces en ese caso? Le das pausa y lo dejas que cargue unos momentos para poder verlo con fluidez. En otras palabras, creas un “colchón” (o un búfer si eres algo geek) en el reproductor para no tener interrupciones.

El mismo concepto debes aplicar para crear tu presupuesto personal si tus ingresos son variables. Veamos cómo.

Presupuesto Personal para Freelancers

Lo primero que debes hacer es marcar una clara división entre tus gastos indispensables y los no indispensables. Utiliza esta información para saber la cantidad absolutamente mínima de dinero que necesitas para continuar tu vida y tu trabajo.

A continuación, decide de qué tamaño quisieras que fuera tu colchón para gastos en términos de meses. No hay una sola respuesta correcta, podrían ser 3, 6 o más meses. Para ayudarte a decidir observa lo siguiente:

  • ¿Tus ingresos como freelancer son estacionales? ¿Ganas más dinero al final de año? ¿Al principio del año? ¿Sube y baja en ciclos de 3 meses?
  • Si trabajas por proyectos, ¿cuál es la duración promedio de cada proyecto? ¿recibes un pago por cada fase del proyecto? ¿un sólo pago al final? ¿la mitad por adelantado y luego por fases?
  • En tu experiencia ¿cuál ha sido el período más largo durante el que tus ingresos han sido más bajos que tu promedio anual de ingresos?

Una vez que tienes una cantidad de meses en mente con al que te sientas cómodo, calcula cuánto dinero necesitas para cubrir tus gastos absolutamente necesarios durante ese período de tiempo. Ese será el tamaño de tu colchón.

Algo importante es que tengas claro que este colchón para gastos no es lo mismo que tu Fondo de Emergencias. Vamos, el nombre lo dice, el Fondo de Emergencias es para emergencias. Tu colchón es algo planificado fríamente para una realidad: tus ingresos fluctúan.

Ahora que ya tienes un monto en mente, ¡comienza a ahorrar específicamente para este colchón! Entre tus metas de ahorro deberás incluir esto como un rubro aparte, al igual que en tu planificación de gastos.

Probablemente tengas que apretar un poco más tus gastos mientras creas tu colchón, pero es algo inevitable. Es como ponerle pausa al video lento de YouTube. Considera conseguir trabajos extras durante un tiempo si no es práctico reducir más tus gastos.

En términos de importancia, tu ahorro para tu colchón de freelancer es más importante, por ahora, que tu ahorro a largo plazo y es igual de importante que los pagos a tus deudas si las tienes. Esto es así porque, por definición, tu colchón es para lo absolutamente necesario: comida, vivienda, luz, agua, etc.

Semáforo

Cuando ya hayas formado tu colchón puedes establecer un sistema de semáforo para tener presente a cada momento tu situación a corto plazo:

  • Verde: significa que tus ingresos de ese mes cubrieron satisfactoriamente tus gastos y te alcanzó para aportar a tus metas a largo plazo. Mientras estés en verde deberás ajustar tu colchón a su nivel original si has tenido que utilizarlo.
  • Amarillo: significa que tus ingresos no alcanzaron para tus gastos o te alcanzaron sin que sobrara nada. En este caso puedes utilizar dinero de tu colchón para cubrir gastos adicionales.
  • Rojo: significa que tus ingresos no alcanzaron para tus gastos y por lo tanto estás utilizando tu colchón. Aparte tuviste una emergencia y estás utilizando dinero de tu fondo de emergencias.

Conclusión

En conclusión, mi recomendación es que crees este colchón para tus gastos como una forma de compensar cuando tus ingresos disminuyen temporalmente.  Por supuesto, puede tomarte un buen tiempo llegar a tener tanto tu colchón como tu Fondo de Emergencias listos para cualquier situación, pero lo importante es comenzar cuanto antes con metas claras y específicas.

¿Ya haces algo similar a esto en tus finanzas? ¿Qué otra recomendación tienes para quienes tienen ingresos variables?

#MF20 Día 18: Actualizando tu Presupuesto

¡Bienvenidos al día 18 del programa, ya casi terminamos!

Ayer mencioné que una de las tareas que deben realizarse periódicamente para mantener el rumbo adecuado es ajustar el presupuesto mensual durante el año. Hoy veremos acciones específicas a considerar en esos ajustes.

¡Comencemos!

Actualizando tu Presupuesto

Utilizando el Plan Anual de Gastos que realizamos en los días anteriores, estos son los pasos a seguir:

Primero, copia tu ingreso del mes anterior al mes siguiente y realiza cualquier ajuste que sea necesario. Si recibiste algún ingreso extra, agrégalo.

Segundo, copia los “gastos” asociados con tus metas de ahorro y copia los mismos montos del mes anterior, a menos que quieras aumentarlos.

¿Qué? ¿Disminuirlos? No sé de qué hablas.

Tercero, usando tu registro de gastos determina en qué categorías de gastos cumpliste exactamente (o casi exactamente) lo que tenías planificado. Muchas cuentas que no varían de mes a mes estarán en este grupo. Copia esos valores a tu planificación para el siguiente mes.

Cuarto, si hubo gastos en los que gastaste más o menos de lo que tenías planeado, deberás manejar la diferencia:

Si el gasto aumentó en este mes, pregúntate ¿es posible que el siguiente mes se repita este aumento o este mes subió el gasto por una anomalía?

Si es posible que el aumento se repita, utiliza esa nueva cantidad para el mes siguiente.

Si es probable que el aumento NO se repita, presupuesta el promedio entre lo que tenías planeado y lo que en realidad gastaste para tener un margen.

Por ejemplo, si planificaste $200 y gastaste $220, para el siguiente mes planifica ($200+$220)/2 = $210.

Si el gasto disminuyó en este mes, haz un análisis similar: ¿es posible que el siguiente mes se repita esta diferencia o fue una condición anómala? Si es una categoría de gastos que intencionalmente estás tratando de reducir probablemente se repita.

Si es posible que la reducción NO se repita, presupuesta lo mismo para el mes siguiente. ¿Por qué? Porque te dará un margen de error saludable

Si es posible que el la reducción SÍ se repita, presupuesta el promedio. Esto te dará una cantidad menor pero de todas formas te deja un margen de error.

Por ejemplo, si planificaste $200 y gastaste $180, para el siguiente mes planifica ($200+$180)/2 = $190

Quinto, agrega cualquier nueva categoría de gastos que haya surgido que consideres que puede ser recurrente en el futuro.

Y por último, actualiza los pagos de tus deudas. Si tienes alguna cantidad extra de dinero puedes aprovecharla para pagar más a tus deudas o ahorrarla. Si terminaste de pagar alguna de tus deudas en el mes que termina, recuerda asignar el dinero que utilizabas para esa deuda a la siguiente en el listado.

¡Y eso es todo por hoy! ¿De qué forma actualizas tu presupuesto actualmente? ¡Comparte tu experiencia en los comentarios!

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 17: Planificando Revisiones Periódicas

¡Bienvenidos al día 17 del programa!

Hoy hablaremos sobre la importancia de planificar por adelantado las fechas en las que harás una revisión a tu programa financiero. De la misma forma que tu automóvil necesita revisiones regulares para asegurarte de que todo está bien, tu programa financiero debe mantenerse actualizado para que sea útil.

Así que ¡comencemos!

Planificando Revisiones

Hay básicamente tres cosas que debes hacer para llevar a cabo tus revisiones de forma efectiva:

  1. Selecciona fechas específicas por adelantado: Esta es una buena forma de garantizar que dedicarás el tiempo necesario para hacer las revisiones. ¿Te ha pasado que dices que harás algo un mes y de pronto llega el fin de mes y no lo hiciste? Eso es lo que queremos evitar.
    En lo personal, reservo el tiempo para hacer estas revisiones un el primer fin de semana de cada mes. Ese fin de semana reviso mis planes del mes anterior. Aparte, cada tres meses reviso mis planes anuales y una vez al año reviso mis planes a largo plazo.
  2. Negociar tiempo: Una vez que seleccionaste las fechas específicas, deberás garantizar que no habrán distracciones durante ese tiempo. Déjales saber con anticipación a familiares o amigos que dedicarás este tiempo para algo importante y que tienes un Yeti que le hará daño a quien te interrumpa.
    Quizás tengas que hablar con tu cónyuge para acordar una fecha que sea conveniente para ambos. Mientras uno hace la revisión el otro puede estar alimentando al Yeti.
  3. Crea recordatorios: Utiliza tu método preferido para crear recordatorios de estas fechas importantes. ¿Usas Google Calendar ¿Tienes un iPhone? ¿Una agenda personal? Cualquier tecnología que utilices para tus recordatorios estará bien. Incluso podrías usar un servicio como Futureme para enviarte mensajes al futuro recordándote de lo que tienes que hacer.

¿Y qué es lo que tienes que hacer? Eso veremos a continuación.

¿Qué hacer en cada revisión?

Primero, debes estar en la mejor disposición de aceptar como te fue en el tiempo que ha pasado. Es probable que hayas cumplido tus objetivos pero también es probable que hayas encontrado obstáculos inesperados.

Esto es normal y lo mejor es que lo aceptes tal y como es sin que te cause frustración. El hecho de que estés haciendo una revisión de tus metas demuestra tu compromiso con las metas que te has planteado.

Segundo, deberás crear versiones actualizadas de tus estados financieros de la misma forma en que lo hicimos durante la primera semana del curso. Mi recomendación es que actualices tu Balance General cada 3 meses y tu Estado de Resultados cada mes.

Y tercero, deberás actualizar tu Plan de Gastos reflejando cualquier cambio que hayas visto en el mes que termina. En la tarea de mañana, veremos con mayor detalle cómo actualizar tus presupuesto mensual para reflejar mejor la realidad.

Por ahora, calcula cuánto tiempo crees que tardarías en llevar a cabo estas tareas, busca las mejores fechas para realizarlas y resérvalas.

¡Y eso es todo por hoy! ¿Ya tienes alguna rutina en la que puedas meter estas actividades? ¿En qué fechas crees que sería mejor para ti hacer estas revisiones? ¡Compártelo en los comentarios!

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 16: Registro de Gastos

¡Bienvenidos al día 16 del curso!

Sería una pena si después de haber llegado hasta este punto pierdes el curso de tus finanzas porque no sabes cómo te va en el día a día.

Para eso, hoy hablaremos sobre cómo puedes llevar un registro eficiente de tus gastos. Este registro te servirá para saber si estás cumpliendo con el plan o no.

Si fueras un pirata, tu presupuesto sería tu mapa y tus metas, la X del tesoro. Pero para poder seguir el mapa, necesitas una brújula. Tu registro de gastos es la brújula.

Ahora, ¡comencemos!

Antes de que vayas a conseguir un loro y un parche para tu ojo izquierdo.

¿Deberías tener un Registro de Gastos?

Antes de hablar sobre cómo hacer un registro de gastos (que es realmente muy simple) quisiera que hablemos de algo más fundamental: ¿deberías tener un registro detallado de tus gastos?

La respuesta más simple es: depende.

¿De qué?

El tipo de personas que más se pueden beneficiar de un registro de gastos detallado son aquellas personas que en realidad no saben a dónde se va su dinero. Si tus categorías de gastos en tu Plan Anual son muy generales porque no tienes una visión clara de a dónde se va tu dinero, definitivamente deberías tener un registro de gastos diario.

Por el contrario, si tus gastos tienden a ser predecibles a lo largo de un mes, y no tienes mucha predisposición a hacer gastos impulsivos, podrías hacerlo semanal o mensualmente.

En otras palabras, si fueras pirata ¿qué tanto necesitarías ver la brújula para corregir el rumbo? ¿con qué facilidad la marea te saca de curso?

¿Podrías dejar de mover el garfio así? Puedes lastimar a alguien.

Creando un Registro de Gastos

  1. Crea un documento de registro: Copia las categorías de gastos de tu Plan Anual en un documento nuevo en donde puedas registrar conforme vayas realizando tus gastos.
  2. Registra en el camino: Siempre pide recibos por tus compras. Si no es posible obtener un recibo anótalos en una libreta o agenda que siempre lleves contigo. O utiliza tu iPhone o similar para anotar.
  3. Consolida tus gastos: Una vez en tu casa actualiza tu documento principal con los gastos del día. Si tus gastos diarios son muy predecibles (debido a tu rutina) podrías hacerlo una vez por semana, en lugar de una vez por día.
  4. Sólo la rutina: Para facilitarte el trabajo, podrías podrías intentar salir de tu casa únicamente con el efectivo necesario para tus gastos rutinarios, más una cantidad fija extra para emergencias. De esta forma, podrías aplazar compras impulsivas hasta el próximo día y durante la noche analizar fríamente si realmente quieres hacer esa compra.
  5. Paga tus gastos mensuales juntos: Investiga bien las fechas en las que debes realizar tus pagos mensuales (agua, luz, teléfono, etc.) para pagarlos todos el mismo día. Si es posible, automatiza el pago por medio de tu banco. Si lo haces así, registra por adelantado el pago de estos gastos en tu documento.

(Nota al margen: si estás en Guatemala aprovecha para ingresar tus facturas a tu planilla de crédito fiscal, en lugar de esperar hasta diciembre!)

Analiza detenidamente tu situación y decide si puedes beneficiarte de un registro de gastos. Si no estas seguro/a, mi recomendación es que lo pruebes al menos por 2 semanas y luego decidas si te sirvió y si quieres continuar haciéndolo. No hay nada como la experiencia directa para tomar decisiones.

¡Y eso es todo por hoy! ¿Consideras que deberías tener un registro de gastos? Si ya lo has intentado antes ¿cuáles han sido tus resultados? ¿Cuándo fue la última vez que visitaste la Isla Tortuga? Te espero en los comentarios.

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 14: Plan Anual de Gastos (Parte II)

¡Bienvenidos al Día 14 del programa!

Ayer, hicimos la primera parte de tu plan de gastos donde contemplaste tus ahorros, gastos mensuales y no mensuales.

Hoy nos enfocaremos en agregar a este plan el pago de tus deudas (si tienes).

Si no lo has hecho, debes analizar tus deudas (según lo que hicimos en el día 8 ) y seleccionar el orden en el que las pagarás, dependiendo del método de pago de deudas que utilizarás.

Si ya tienes esto claro, ¡comencemos!

Plan de Pago de Deudas

Utilizando la misma hoja de cálculo que usaste ayer, lista tus deudas en el orden en el que deseas pagarlas. Aún no pongas nada en la columna de Estimación Inicial, nos encargaremos de eso en un momento.

De la recopilación inicial de información que hicimos deberías tener los siguientes datos por cada deuda:

  • El saldo actual de tu deuda
  • Tasa de interés anual
  • Pago mínimo mensual

Aparte, de las metas que estableciste, deberías tener el tiempo estimado (en meses) en el que quisieras pagar tus deudas.Con esta información, trazaremos el plan (de este primer año) de pagos a cada deuda.

Es posible que hayas establecido una meta —digamos 2 años— para pagar una deuda, pero ahora que hagamos los cálculos te des cuenta de que con el dinero que tenías planificado destinar para pagar no sea posible hacerlo en este tiempo. En tal caso, tienes 3 opciones:

  • Reduces más tus gastos para poder destinar más dinero al pago de deudas
  • Aumentas tus ingresos, también para poder pagar más rápidamente
  • Aumentas el plazo que tenías planeado para pagar la deuda

¿Parece una situación difícil? Lo es. Pero debes tomar una decisión. ¿Cómo sabes qué decisión tomar? Comencemos a poner todo en perspectiva incluyendo tus deudas en el plan de gastos. Deberás ir ajustando gastos, pagos de deudas, ahorro hasta encontrar el balance adecuado para ti.

Para esto, primero, toma tu primera deuda y calcula cuánto deberías pagar cada mes para terminar de pagarla en el tiempo que tu quieres. Para hacer esto, puedes:

  • Utilizar una calculadora como la que encuentras aquí. (utiliza el segundo formulario)
  • Si estás familiarizado con las fórmulas de Excel (o tu programa de hojas electrónicas) utiliza la fórmula PMT()

Estamos asumiendo que utilizarás el método de Bola de Nieve o de Costo Mínimo y que cada mes pagarás mas que el pago mínimo. También, para fines de este ejercicio asumiremos que tus deudas no aumentarán durante la duración del plan y que tus deudas mantienen una tasa de interés fija.

Segundo, el dato que obtengas es el pago mínimo aproximado que deberías hacer a tu deuda para cumplir con tu meta. Escribe este valor como Estimación Inicial para esa deuda.

Tercero, de la misma forma que con tus gastos no mensuales, llena todos los meses necesarios con la cuota que calculaste.

Cuarto, si tienes más de una deuda, escribe el pago mínimo de la siguiente en la columna de Estimación Inicial.

Quinto, rellena cada mes de tu siguiente deuda con el pago mínimo pero sólo hasta el último mes en el que todavía pagarás algo por la primera deuda. Por ejemplo, si los pagos de tu primera deuda llegan únicamente hasta septiembre, sólo hasta ese mes escribe los pagos mínimos de tu segunda deuda.

Sexto, Calcula cuál será el saldo de tu segunda deuda en el mes en el que terminas de pagar la primera. Para esto, utiliza esta otra calculadora con los datos iniciales de tu segunda deuda y en la última columna de los resultados que te genera, busca cual sería el nuevo saldo.

Séptimo, utiliza el nuevo saldo de tu deuda para calcular el nuevo plazo en el que pagarías la deuda con el nevo pago mínimo. Para esto utiliza de nuevo la calculadora del paso uno, pero esta vez utiliza el formulario de arriba.

Octavo, repite de los pasos cuatro a siete para todas las nuevas deudas que tengas si es necesario.

Noveno, haz de nuevo todos tus cálculos para asegurarte que los hiciste bien la primera vez 😉

Fácil, ¿verdad?

Estoy totalmente consciente de que este proceso podría ser mucho más sencillo con herramientas adecuadas. Si es la primera vez que haces algo así, las instrucciones pueden resultar confusas. Pero te aseguro que no lo hice intencionalmente 🙂

Afortunadamente, haber escrito esto paso a paso me hizo ver muchas necesidades que puede tener alguien que quiere tomar control de sus finanzas. En otras palabras, encontré muchas posibilidades para seguirles proporcionando valor a todos ustedes… y ya sabes lo que pienso de generar valor para la sociedad!

Pero regresando al tema, debes poner poner atención a la fila de Diferencia para asegurarte que no estás asignando más de lo que realmente puedes pagar.

Si debes realizar ajustes para que todo quepa en tus posibilidades, trata de mantener esta jerarquía de importancia:

  1. Si puedes, reduce más gastos
  2. Si ya no puedes reducir más gastos, aumenta el plazo en el que planeas pagar tus deudas
  3. En último caso, reduce la cantidad de ahorro. ¡Si, en último caso! Porque recuerda que es mejor haber creado tu fondo de emergencias que cubrir una emergencia con más deudas.
  4. Siempre mantén un enfoque en aumentar tus ingresos para reducir el tiempo en el que pagas tus deudas.

¡Esto es todo por hoy! ¿Qué te ha parecido la actividad de hoy? Como siempre, te espero en los comentarios.

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 13: Plan Anual de Gastos (parte I)

¡Bienvenidos al Día 13 del programa!

Hoy haremos la primera parte de tu plan anual de gastos. Este plan incluirá todas las salidas de dinero relacionadas con gastos y ahorro. La parte de las deudas la haremos mañana. Al final de la tarea veremos como este plan cumple con los principios de los que hablamos ayer.

¡Comencemos!

Plan de Gastos

Por lo general te pido que utilices una hoja de papel o una hoja electrónica. En caso de que realmente haya alguien haciéndolo en papel, déjame decirte que la tarea de hoy será mucho, mucho más fácil si la haces en una hoja electrónica. 😉

Actualización: Iván en los comentarios me sugirió que subiera un ejemplo en Excel del plan de gastos… y aquí está! Haz clic aquí para descargarlo.

Primero, escribe los siguientes títulos en diferentes columnas:

  1. Descripción del Gasto/Ingreso
  2. Estimación Inicial
  3. Una columna por cada mes del año

Como ya estamos a más de la mitad de enero, podrías comenzar con febrero. Tú decides.

Segundo, escribe en la primera fila tus ingresos estimados. Salario, bonos, comisiones, etc.

Tercero, debajo de tus ingresos escribe tus metas de ahorro mensual. Si tienes una sola meta sólo tendrás una línea, pero si tienes por ejemplo, Ahorro para Inversión y aparte Ahorro para Fondo de Emergencias, escríbelos por separado. En la columna de Estimación Inicial escribe cuánto ahorrarás mensualmente en cada categoría.

Cuarto, a continuación escribe tus gastos *mensuales* y sus respectivos montos. Si tienes gastos que ocurren cada cierta cantidad de meses aún no los escribas, nos encargaremos de esos en un momento.

Quinto, unas cuantas filas abajo (dejando espacio para tus gastos no mensuales y tus deudas) escribe y calcula la diferencia entre ingresos y gastos. En lo personal, prefiero escribir los ingresos con signo negativo y los egresos con signo positivo y hacer una “autosuma”. Lo hago así porque es más fácil escribir los gastos sin tener que recordar ponerles un signo negativo al principio. Y cuando olvidas ponerlo terminas sumando tus gastos y luego no sabes por qué te sobra dinero!

En este momento deberías ya tener una idea de cuánto dinero te sobra para repartir entre tus gastos “no mensuales” y tus pagos de deudas. Como mencioné al principio hoy sólo planificarás tus gastos y mañana tus deudas. Sin embargo, habrá un ir y venir entre la revisión de tus gastos y la de tus deudas para ajustar todo.

Sexto, escribe tus gastos no mensuales —escribe sólo el nombre, los montos todavía no— en orden ascendente de frecuencia. Es decir, primero escribe los que ocurren cada dos meses (por ejemplo, el servicio al automóvil) y luego los que ocurren cada 6 meses (por ejemplo, una matricula estudiantil) y por último los que ocurren cada año (regalos de cumpleaños, navidad, vacaciones, etc.)

Procura que también queden en el orden en el que sucederán. Es decir, si tienes un cumpleaños en Julio, ese iría antes de Navidad.

Séptimo, reparte cada gasto no mensual en mensualidades como lo harías con una deuda.

Por ejemplo, supongamos que tienes un gasto recurrente cada dos meses de $400. Para este gasto, asignarías $200 mensuales y al cabo de dos meses ya tendrías el dinero listo sin tener que apretar el resto de tu presupuesto (o peor, endeudarte) ese mes.

Otro ejemplo, digamos que harás un gasto de $2,400 en julio. Sin tomar en cuenta enero, tienes 6 meses para prepararte para ese gasto. Cada mes deberías asignar $2,400/6 = $400. En este caso, surge la pregunta ¿qué haces con esos $400 después de que ya realizaste el gasto? Depende de tus prioridades. Podrías reasignarlo a tus deudas, ahorros u otros gastos. Podrías comenzar a ahorrar para el mismo gasto, pero el siguiente año (aunque como ahora tendrás más tiempo, la cantidad mensual podría ser menor).

Octavo, una vez que tengas el estimando mensual para tus gastos no mensuales, escríbelo tanto en la columna de “Estimación Inicial” como en la columna de los meses en los que ahorrarás cada parte del gasto total. Esto te servirá porque a lo largo del año, conforme vayas refinando tu presupuesto ya tendrás esa cantidad lista.

Principios de planificación

Ahora, hagamos una revisión rápidamente de lo que acabamos de hacer verificar que hayamos cumplido con los principios de ayer:

  • Supuestos: La columna de “Estimación Inicial” representa lo que tu supones en este momento que serán tus gastos. A lo largo del año, irás refinando estos supuestos conforme te enfrentes a los gastos en la vida real.
  • Ejecución: La parte de tomar en cuenta la capacidad de ejecución que tienes, la trabajamos cuando analizaste tus gastos y deudas la primera vez. Y el ir acomodando todo en tu plan anual, también te ayuda a encontrar tu verdadera capacidad de ahorro y pago de deudas.
  • Nivel de detalle: El nivel de detalle en este caso abarca un mes (con todos tus estimados de gastos) y probablemente varios meses en el caso de los gastos no mensuales.
  • Planear planear: para completar el punto anterior, haremos una tarea donde especificarás los días (y la forma) específicos en que actualizarás tu presupuesto.
  • Refuerzos externos: Al finalizar todos los pasos de tu presupuesto, puedes imprimirlo y mantenerlo al alcance para hacer revisiones constantes. También puedes extraer las metas más importantes (como de ahorro y pago de deudas) y mantenerlas visibles en tu espacio de trabajo.

¡Eso es todo por hoy! ¿Qué te ha parecido esta actividad? ¿Ya tenías algún instrumento para iniciar la actividad? Recuerda que no necesariamente tienes que hacerlo exactamente como lo he descrito, puedes hacer tus propios cambios para ajustarlo a tu personalidad. Si haces algún cambio compártelo en los comentarios!

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 10: Ahorro, Inversión y Previsión

¡Bienvenidos al día 10 del programa! La primera semana trabajamos en averiguar dónde estás financieramente y durante esta semana hemos trabajado en averiguar hacia dónde quieres ir. La actividad de hoy será la última que te ayudará a decidir tu destino. Hoy hablaremos de tus metas de ahorro, inversión y previsión financiera.

Pero antes, quisiera agradecerles a todos por varias cosas:

  • Primero, evidentemente, por participar. En este momento hay más de 300 personas inscritas y eso me causa mucha satisfacción.
  • Segundo, agradezco a todos los que han comentado sobre el programa aquí en el sitio Web, en Twitter, Facebook y a quienes me han contactado en privado para hacerme preguntas y darme sus sugerencias.
  • Y tercero, quiero agradecer a todos los que han recomendado el programa a sus amigos y familiares. La misión primordial de este programa (y del sitio) es ayudar las personas a tener una buena relación con el dinero y mientras más personas lo conozcan, mejor. ¡Gracias!

Luego de mi discurso de agradecimiento (estoy practicando para el Nobel), ¡comenzamos!

Ahorro, Inversión y Previsión

Una de las reglas más populares de finanzas personales es que ahorres 10% de tus ingresos siempre. Considero que 10% es lo mínimo que deberías ahorrar. Lo óptimo sería que ahorraras 15% o más. Si luego de analizar tus gastos y tus deudas aún no queda espacio para comenzar a ahorrar, te recomiendo que busques la forma de reducir tus gastos un poco más o buscar formas de ingresos extra para lograr iniciar tu ahorro.

Hay tres aspectos importantes a los que debes poner mucha atención especialmente si hasta este momento no ahorras parte de tu ingreso:

  • Ahorrar debe ser práctico. Cuando comencé a desarrollar el hábito del ahorro cometí varios errores de los que hablo en el artículo Como iniciar (o hacer crecer) tus ahorros. Dale una revisada para que no cometas los mismos errores!
  • En ese mismo articulo, menciono que debes aprender a vivir con el 90% (o menos) de tus ingresos. Esto es por lo general algo completamente alcanzable, pero la mayoría de obstáculos vienen de la resistencia a cambiar tu estilo de vida.
  • Lo más importante del ahorro es el hábito que formas. Si logras formar un hábito de forma sostenible estarás entrenando a tu mente a hacer cambios de cualquier tipo y apegarte a ellos. El hábito es incluso más importante que el dinero que ahorras. El dinero lo puedes perder, pero si tienes buenos hábitos podrás volver a levantarte.
  • Yo se que dije tres, pero esto es realmente importante: Aún cuando tengas deudas deberías ahorrar! Esto es así porque, si te has estado esforzando grandemente para pagar tus deudas y cuando vas a la mitad surge una emergencia, no querrás volver a endeudarte para cubrir los gastos, ¿cierto?

Así que, ¿como deberías refinar tus metas en relación al ahorro?

Metas Específicas

  1. Un fondo de emergencias para sustituir tus ingresos si hace falta (despidos, pérdidas en negocios, incapacidad para trabajar, etc.)
  2. Adquisición de seguros adecuados dependiendo de tu situación particular
  3. Un fondo de inversión para el futuro ya sea utilizando instrumentos financieros (acciones, bonos, etc.) o para iniciar (o invertir en) un negocio.

Tu fondo de emergencias es básicamente dinero que tienes guardado de forma “semi-accesible”. Debe ser suficientemente fácil de obtener por si tienes una emergencia, pero no tan fácil de obtener para que no tengas la tentación de usarlo para algo que no sea una emergencia. Desde una cuenta de ahorro sin tarjeta de débito ni chequera, hasta certificados de depósito a 30 días, hay diferentes formas de mantener ese dinero cerca. La decisión dependerá de, entre otras cosas, qué tan urgente puede ser la necesidad de dinero. Esta urgencia puede reducirse grandemente con una buena selección de seguros (como verás a continuación).

¿Cuánto deberías tener en tu fondo de emergencias? No hay una respuesta universal para esto. Una forma de estimarlo sería ¿Cuánto tiempo crees que te tardarías en conseguir un empleo nuevo o levantar de nuevo tu negocio si llegaras a necesitarlo? ¿3 meses? ¿6 meses? Multiplica tu respuesta por tus gastos fijos mensuales (no relacionados con tu empleo) más 1 mes extra para cubrir los gastos de buscar empleo, como entrevistas, imprimir tu CV, etc., y ese debería ser el tamaño de tu fondo de emergencias.

En cuanto a los seguros, analiza tus necesidades de cobertura: ¿Hay personas que dependen de ti financieramente? Necesitas un seguro de vida. ¿Eres auto-empleado y tu trabajo es propenso a accidentes? Necesitas un seguro de salud y accidentes. ¿Tienes vehículo (y no eres precisamente el mejor conductor del barrio)? Necesitas un seguro contra daños a terceros. Y así, sucesivamente deberás analizar qué tipo de seguros necesitas para invertir en lo que sea necesario.

Consigue un buen asesor de seguros para tomar mejores decisiones. Una buena forma de encontrarlo es pidiendo referencias entre amigos que ya tengan seguros y estén satisfechos. Esto es mejor que simplemente llamar a la aseguradora y que te asignen a cualquier asesor. Como consejo extra, sería bueno que investigaras cuáles seguros utiliza personalmente tu asesor. Si no utiliza ninguno, deberías sospechar!

Finalmente, en cuanto a tu Fondo para Inversiones, depende de la decisión que tomaste ayer sobre qué tipo de inversionista quieres ser. Es común que siendo empleado entres al mundo de inversiones financieras a través de fondos de pensiones o planes de retiro a través de tu empleador. Las características específicas varían de país a país, pero como regla general, debes saber que sólo porque inviertes en la bolsa, no eres un inversionista sofisticado!

Si tu plan de retiro depende de tu conocimiento de inversiones más allá del conocimiento básico, recuerda la Regla de Plata de las Inversiones: invierte tiempo en aprender antes de invertir dinero que no quieres perder!

Esta es la Regla de Plata porque aunque es brillante, no todo lo que brilla es oro.

¿Cuánto deberías tener en tu fondo de inversiones? De nuevo, no hay una respuesta universal. ¿Quieres invertir en bienes raíces? Investiga la inversión que buscas, calcula cuánto dinero sería lo óptimo para dar un pago inicial y esa es tu meta. ¿Quieres iniciar un negocio? Haz un plan básico de negocio para saber cuánto (si es que necesitas) invertirás para iniciar. ¿Quieres invertir en una bolsa de valores —y ya hiciste tu tarea de investigación—? Realmente necesitas poco dinero si vas a comprar pocas acciones.

Recuerda que tus inversiones no necesariamente se tienen que limitar a inversiones para cuando seas mayor y ya no puedas/quieras trabajar. ¿Qué tal si quieres ir al espacio y no eres astrofísico y entonces tienes que pagar $20 millones? Invierte para pagar tus sueños. Por supuesto, un retiro seguro puede ser tu sueño, pero no necesariamente tiene que serlo. Puedes escoger los que quieras. Incluso puedes copiar el mio de ir al espacio.

¡Y eso es todo por hoy! Recuerda que durante esta semana sólo estamos decidiendo y clarificando qué es lo que quieres. A partir del lunes comenzarás a hacer planes y aprender la mejor forma en que puedes lograr lo que quieres. En otras palabras, la próxima semana comenzamos con el cómo obtener lo que quieres.

Durante el fin de semana, revisa tus actividades hasta ahora. Pon especial atención a tu visión de 5 años y a las metas específicas que has formado. Una práctica útil es que escribas tus metas específicas como “Tengo un fondo de emergencias de $20,000” y las pongas en un lugar visible en tu casa u oficina. No se trata de que estés obsesionado, se trata de que no quieres seguir obteniendo los mismos resultados de siempre. Está en tus manos.

¡Nos vemos en los comentarios!

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 7: Analizando tus Gastos

Ayer creaste una serie de metas específicas para lograr este año en relación a tus finanzas. En la actividad de hoy, analizarás tus gastos tomando en cuenta esas metas para que tú mismo/a decidas qué cambios son necesarios para lograrlas.

Analizando tus gastos

De nuevo, en una hoja de papel (o electrónica) lista tus gastos para este año. Puedes usar como base el listado de gastos de tu Estado de Resultados, pero asegúrate de agregar cualquier gasto nuevo y eliminar los que ya no vayas a tener.

En este paso, puedes obviar los gastos que tienes de pago de deudas porque lo importante es entender la importancia real de cada uno de tus gastos en relación a tus metas. Para esto, reordenarás tu lista de gastos de una forma especial.

¿Cómo la reordenas? Mira cada gasto en tu lista y piensa en qué tan importante es para lograr las metas que estableciste ayer. ¿cómo te hace sentir haber gastado en cada categoría? ¿preferirías haber utilizado tu dinero en una categoría diferente?

Selecciona el gasto más importante para cumplir tus metas y escribe un número uno al lado. Luego, selecciona el más importante del resto de gastos y escribe un número dos. Sucesivamente, marca todos tus gastos hasta que todos tengan un número a su lado que denota su importancia relativa. A continuación, reescribe la lista con el nuevo orden de importancia.

El objetivo es que al final tengas una lista que comience con el gasto más importante y esencial para cumplir tus metas, y termine con el menos importante (y por lo tanto, el más fácil de reducir).

Esto puede tomar un tiempo pero vale la pena. Es probable que te topes con dos gastos entre los que no puedes decidir cuál es más importante. Esta bien si los ves con el mismo nivel de importancia, lo esencial es que tengas una idea general de qué tan relevantes son para tus metas.

¿Qué puedes reducir?

Ahora que ya tienes tu lista ordenada por importancia, viene una de las tareas más importantes de todo el programa.

Aquí es donde decides qué en qué cosas dejarás de gastar porque no te ayudan en nada a alcanzar tus objetivos. En otras palabras, eliminarás gastos superfluos que únicamente sacan dinero de tu bolsa pero no te devuelven nada.

Para esto, comienza de abajo hacia arriba y responde: ¿como te sentirías si eliminas al 100% este gasto? ¿habrían serias consecuencias si lo elimino o simplemente me sentiría incómodo/a? ¿Este gasto es un gusto o una necesidad? ¿Es más importante cumplir mis metas cuanto antes o mantener este gasto?

Al responder estas preguntas es muy probable que encuentres mucha resistencia interna hacia realizar un cambio. Pueden surgir muchas justificaciones para mantenerlo, pero debes analizar ¿cuál es el origen de esas justificaciones?

Por ejemplo, ¿qué pasaría si estás analizando tu categoría de gastos “Salidas al cine”? Podrías decir que el entretenimiento es una necesidad humana y que, de hecho, te ayudará a mantenerte motivado/a para cumplir tus metas. Y tendrías toda la razón, pero ¿ir al cine es la única forma de entretenimiento? ¿hay alguna forma en que puedas entretenerte sin gastar ese dinero? Si no quieres eliminar por completo ese gasto, ¿al menos podrías reducirlo?

Y en lugar de “salidas al cine” puede ser cualquier cosa. Los pagos de tu televisor/auto/juguete nuevo, televisión por cable, comidas fuera, regalos, ropa, zapatos, joyas, etc. Cualesquiera que sean tus decisiones en cuanto a tus gastos, lo más importante es que estés consciente de que estás decidiendo hacer cambios para cumplir tus propias metas.

¡Y eso es todo por hoy! ¿Qué te ha parecido la actividad de hoy? ¿Cuáles son los gastos que más difíciles consideras de reducir? ¡Cualquier pregunta o comentario es bienvenido!

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.

#MF20 Día 6: Establece Metas

¡Bienvenidos al Día 6 del programa Mejora tus Finanzas en 20 Días!

Durante los primeros 5 días, nos dedicamos a responder la pregunta ¿en donde estoy financieramente? Ahora que lo sabes, es hora de pensar… ¿a dónde quiero ir?

La actividad de hoy consiste de 2 pasos:

  • Crear una visión de tu vida a 5 años
  • Transformar esa visión en metas financieras específicas para 1 año

Es importante que tengas en cuenta lo siguiente:

  • Al final de la actividad tendrás una primera versión de tus metas que iremos refinando durante los próximos días.
  • Como verás más adelante, ahora lo más importante es clarificar “a dónde quieres llegar”, no “como”. Eso lo veremos más adelante.
  • Para algunos esta tarea será muy difícil, especialmente al tratar de visualizar su futuro. Pero eso es de esperarse. Nadie dijo que iba a ser fácil. 😉

¡Comencemos!

Visión a 5 años

Para este ejercicio, tendrás que hacer mucha introspección. Lo ideal es que busques un lugar tranquilo donde puedas sentarte y meditar tranquilamente.

Para comenzar, en una hoja de papel (o un procesador de texto) escribe una descripción vívida de cómo quieres que sea tu vida en general dentro de 5 años. Describe qué estarás haciendo, con quién estarás, cuántos años tendrás, cómo será un día típico de tu vida, etc. Escríbelo en tiempo presente, como si ya estuvieras ahí explicando a alguien cómo es tu vida. Usa muchos detalles específicos, especialmente sobre cómo te sientes en ese momento. En esta descripción no es esencial que te enfoques en cómo serán tus finanzas.

No apresures mucho este ejercicio. Es importante que te tomes tu tiempo y crees una buena visión de tu futuro. El propósito de esta visión es clarificar la razón por la que quieres mejorar tus finanzas. Esto es importante porque en el día a día es muy fácil que pierdas de vista el fin que buscas.

Asegúrate de guardar esta descripción porque la utilizarás más adelante.

Metas para 1 año

Una vez que tengas una visión completa de tu vida dentro de 5 años, es hora de hacerla más específica, de forma que puedas comenzar a tomar acciones concretas para hacerla realidad.

Teniendo en mente tu visión a 5 años, responde a la siguiente pregunta: ¿qué puedo hacer con mis finanzas durante el próximo año encaminado a hacer realidad mi visión a 5 años? Por supuesto, al finalizar este ejercicio, te animo a que hagas la misma pregunta con otras áreas de tu vida, por ejemplo: ¿qué puedo hacer con mis relaciones personales durante el próximo año encaminado a hacer realidad mi visión a 5 años?

Escribe tus metas financieras en términos de:

  • Ahorros y gastos al final del año
  • Ingresos netos
  • Nivel de endeudamiento.

También especifica, si es relevante, cómo generarás tus ingresos ¿iniciarás un negocio? ¿cambiarás de empleo? ¿conseguirás un empleo extra? ¿qué ahorros tendrás? ¿un fondo de emergencias? ¿ahorro para tus vacaciones? ¿comprarás una casa?

Como ejemplo, a principios de este año (¡hace 11 días!) escribí sobre mis propias metas financieras: $1,000/mes de ingresos con este sitio y lanzar 3 productos propios. Este es el nivel de detalle que deberías buscar.

Algo que puede ayudarte a clarificar estas metas es que escribas cómo se verían tus estados financieras (Balance General y Estado de Resultados) al final del año.

Recuerda que en esta fase no debes enfocarte en “cómo” lograrás estas metas. Por ahora lo importante es que clarifiques “cuáles” son tus metas y “por qué” quieres alcanzarlas.

¡Y eso es todo por hoy! Durante los próximos días, tomaremos la versión preliminar de tus metas y con ayuda de tus estados financieros, trazarás planes específicos para lograrlos.

¿Qué piensas de la actividad de hoy? ¿Cuál es el reto mas importante que has encontrado al realizarla? ¡Cualquier duda o comentario es bienvenido!

¿Terminaste? Sigue con la siguiente tarea. ¿No sabes qué es MF20? Puedes leer más aquí.