Apalancamiento Financiero – Parte I

Como probablemente sabes me gusta marcar la separación entre el aspecto personal y el aspecto financiero de las finanzas personales. Y también me gusta escribir artículos que de verdad te ayuden en algo.

El concepto del apalancamiento se presta perfectamente para esto.

En finanzas el término «apalancamiento» se refiere a utilizar una deuda para mejorar el retorno de una inversión. ¿No es genial que se pueda usar deudas —que a veces las pintan como engendros del mismísimo infierno— para tu beneficio? Este tipo de apalancamiento es lo que veremos en la segunda parte de este artículo.

Pero antes, en esta primera parte, veremos cómo puedes usar el apalancamiento personal para hacer cambios de comportamiento en tu vida que te permitan disfrutarla más (y mejorar tus finanzas).

¿Por qué hacerlo de esta forma? Porque de nada te sirve saber como mejorar el retorno de una inversión a través de una deuda, si no has logrado instalar hábitos adecuados para iniciar tus ahorros y pagar tus deudas.

Claro, esa información es importante (por eso hablaremos de eso en la segunda parte), pero de nada sirve llenarte la cabeza de información si no puedes hacer algo con ella.

Motivación

Una de las cosas más importantes que podemos aprender sobre nosotros mismos es ¿qué nos motiva? En general, podríamos hablar de tus metas y aspiraciones, pero para lograr cambios en nuestra vida necesitamos algo más fundamental.

¿Qué puede ser más fundamental? Existen dos fuerzas en la vida de todas (absolutamente todas) las personas que motivan cualquier acción: el sufrimiento y el placer.

¿No es verdad que todo lo que haces, lo haces para evitar algún sufrimiento o para obtener algún placer?

Piénsalo por unos minutos.

Te alimentas, tienes un trabajo, vas al cine, te casas, te divorcias, hablas con tus hijos, no hablas con tus hijos, aprendes a tocar un instrumento musical, coleccionas zapatos, coleccionas novias/os… todo lo haces porque intentas evitar un sufrimiento, obtener un placer, o ambos.

Estas dos fuerzas han estado detrás de todos el progreso y los problemas humanos. Desde Hitler hasta el Dalai Lama, todos estamos motivados por ellas.

Es posible que ya hayas reflexionado sobre esto, pero al hacerlo de forma más directa y consciente te proporciona la herramienta más poderosa posible para hacer cambios en tu vida.

Cuando logramos identificar estas dos fuerzas claramente actuando en nuestra vida, ¿no tiene sentido que aprendamos a usarlas en nuestro beneficio?

Por ejemplo, puede ser que tengas el hábito de gastar tu dinero sin darte cuenta en cosas innecesarias. Al final del mes sientes culpa por tus gastos pero no encuentras una forma de cambiar el comportamiento. Luego intentas hacer un presupuesto personal o hacer un registro diario de tus gastos, pero a los pocos días lo abandonas y regresas al mismo comportamiento de antes.

O puede ser que tengas una idea de un negocio que has intentado realizar por meses pero nunca logras obligarte a trabajar en ella. Siempre encuentras alguna otra actividad (productiva o no) que te aleja de tu meta.

Otro ejemplo puede ser que lleves mucho tiempo con las ganas de pedir un aumento o simplemente renunciar a tu empleo, pero hay algo que te ha detenido.

Se por mi experiencia propia, que esas situaciones son muy frustrantes. Pruebas todo tipo de técnicas pero nada parece hacerte cambiar.

¿Es posible que al analizar nuestras motivaciones más fundamentales encontremos una forma de romper el círculo?

Condicionamiento

La primera vez que leí sobre el apalancamiento personal fue en el libro Despertando al Gigante Interior de Tony Robbins.

En este libro, Robbins detalla varias formas en las que uno puede “programar” su mente para cambiar comportamientos específicos. Esta serie de técnicas fueron conocidas inicialmente como “Programación Neuro-lingüística” (NPL en inglés).

Sin embargo, para evitar que las personas pensaran que su mente podía ser programada cual computadora por alguien más y evitar la responsabilidad de su propia vida, Robbins evolucionó las técnicas hacia algo conocido como Condicionamiento Neuro-asociativo.

Pero dejando los nombres sofisticados por un lado, veamos de qué se trata. La teoría va así:

Si cada acción que tomas está orientada a evitar un sufrimiento, obtener un placer, o ambos; la forma más efectiva de evitar esa acción es encontrar un sufrimiento o placer opuesto al que te motiva a realizarla.

Veamos un ejemplo concreto:

Supongamos que has estado acumulando una gran deuda en tus tarjetas de crédito en compras que, a sangre fría, te parecen innecesarias. Por definición sabemos que las compras las haces por el placer que recibes al hacerlas o por evitar algún tipo de sufrimiento. Por ejemplo, podría ser que tienes algún problema en otra área de tu vida del que tratas de escapar. Comprar y comprar te proporciona un tipo de placer porque te aleja de tus otros problemas.

¿Qué puedes hacer para cambiar el comportamiento?

Primero, debes trasladar tu atención del comportamiento que NO quieres, al comportamiento que SÍ quieres. Debes crear una imagen vívida —una especie de película mental— de lo que sí quieres en tu vida. Lo mejor es que describas por escrito como SI quieres que sea tu vida. Por ejemplo, al decir “ya no quiero gastar en cosas innecesarias y endeudarme” refuerzas la imagen mental de lo que NO quieres. En lugar de eso, podrías imaginar en qué cosas SI quieres usar tu dinero.

El segundo paso es obtener el apalancamiento en sí. Esto significa que asocies tanto dolor como puedas a no cambiar el hábito y tanto placer como puedas a SÍ cambiar el hábito.

En nuestro ejemplo, alguien podría hacerse estas preguntas para asociar dolor a NO cambiar su comportamiento: ¿cuánto me está costando física, mental, emocional, financiera y espiritualmente este comportamiento? ¿como le afecta a las personas que quiero? ¿que cosas me perderé en la vida si no cambio?

Para asociar placer a realizar un cambio, podría hacerse estas preguntas: ¿como me sentiría conmigo mismo/a si hago este cambio? ¿qué ganaría mental, financiera, física, espiritualmente? ¿cómo se sentirían mi familia y mis amigos? ¿qué cosas placenteras podría hacer con mi vida?

Al lograr esta asociación fuerte de dolor a NO cambiar estás usando el dolor como una palanca para empujarte hacia el cambio. De la misma forma, al asociar un gran placer a realzar cambios en tu vida, logras empujarte hacia tu meta.

Hay diferentes técnicas para reforzar un nuevo comportamiento. En el libro de Robbins hay múltiples ejercicios y ejemplos de estas técnicas. Desde los clásicos de poner tus metas por escrito en un lugar visible (que funciona para muchos aunque no para mi) hasta ejercicios escritos y afirmaciones.

Lo mejor que puedes hacer es experimentar con diferentes formas de mantener viva las asociaciones de dolor y placer para encontrar la que te da mejores resultados. No todos somos iguales en este sentido. Algunas personas logran hacerlo con simplemente recordar las respuestas a las preguntas de arriba. Hay quienes necesitan hacerlo por escrito y re-leer su película mental. Hablar con alguien sobre el proceso que estás llevando puede ser muy útil. Recuerda, la clave es experimentar.

No te Castigues

Es importante aclarar algo: no es lo mismo usar el dolor para condicionar un comportamiento que autoflagelarte por errores del pasado.

“Usar el dolor” puede sonar a algo negativo, como a masoquismo, pero no es eso.

¿Cuál es la diferencia? Míralo de esta forma:

En este momento te encuentras frente a dos posibles futuros: uno donde continúas un comportamiento prejudicial y no cumples tus metas; y otro, donde sustituyes tu comportamiento perjudicial por otro más beneficioso y avanzas hacia tus metas.

La idea del condicionamiento es asociar dolor a uno de estos futuros y placer al otro.

El problema sería que asociaras una gran cantidad de dolor al pasado. Eso no tiene ningún sentido porque, evidentemente, no puedes hacer nada al respecto. Hacerlo, sería enfocarte de nuevo en lo que NO quieres. Es mejor sonreir al pasado, bueno o malo; aprender lo que se pueda y seguir adelante.

Tu Tarea de Hoy

  • Primero, quiero saber tu opinión. ¿Qué hábitos podrías cambiar usando esta técnica? ¿Qué te ha funcionado (y qué no) para hacer cambios así en tu vida? Comparte tu experiencia en los comentarios.
  • Luego, si consideras que este artículo te a ayudado en algo o que podría ayudar a alguien más, ayúdame a correr la voz en Facebook, Twitter, o tu red social favorita!
  • Si ya tienes en mente algún cambio que quisieras introducir en tu vida, hoy es el mejor día para hacerlo. Tómate unos 20 minutos para analizar qué comportamiento quisieras cambiar y encuentra una forma de hacer asociaciones fuertes para lograr el apalancamiento necesario para cambiar.

7 Errores que tus Amigos Cometen en sus Finanzas

Todos sabemos que hay muchas personas con problemas financieros de todo tipo. Yo he tenido muchos de estos problemas y seguramente tú has tenido algunos también. Pero mientras aún estamos en la batalla por solucionarlos es fácil comenzar a ver los árboles y no ver el bosque.

En otras palabras, es fácil perder de vista el panorama general de nuestras finanzas porque nos preocupamos de los pequeñísimos detalles. Sin embargo, para otras personas es más fácil ver la situación completa porque no están tan involucradas.

Como dice el viejo y conocido refrán: “Es más fácil ver la paja en el ojo ajeno”.

Así que, ¿que síntomas puedes ver en otras personas que te ayuden a saber que tienen problemas financieros? y más importante ¿por qué querría alguien saber si sus amigos tienen problemas financieros?

7 Errores que tus Amigos Cometen en sus Finanzas

  1. Ven el dinero como un fin. Uno de los problemas más comunes en nuestra sociedad es que se pierde de vista el verdadero papel del dinero en la vida. Recuerda siempre que el dinero no es un fin en sí mismo y que cualquier actividad que realices debe tener un objetivo más allá que el de simplemente ganar unos dólares.
  2. No aceptan que tienen problemas. Aún cuando tú puedas ver que tienen problemas financieros, al preguntarles te dirán que todo está bien. Pretender que todo está bien y mantener las apariencias sólo hará que sus problemas aumenten con el tiempo.
  3. No toman completa responsabilidad. Puede ser que acepten que tienen problemas, pero siempre encontrarán alguien a quién echarle la culpa. Puede ser su cónyuge, la mala suerte, sus padres, el gobierno, etc. Cualquier sugerencia que hagas para mejorar su situación encontrará oídos sordos porque no es culpa de ellos y asumen que, por lo tanto, tampoco es su responsabilidad.
  4. No tienen metas claras. Puede ser que un día comiencen a ahorrar, pero si les preguntas ¿para qué ahorran? no lo saben. Tampoco saben para qué trabajan. No saben qué quieren lograr en la vida. La falta de metas se traduce en falta de motivación para hacer cambios positivos. De hecho, no hay algo que sea concretamente “positivo” hacia lo que puedan apuntar.
  5. Sus relaciones personales no los ayudan. Sus familiares o amigos más cercanos son una carga extra en su camino. Los has visto ponerse una meta sólo para sucumbir ante la presión de su grupo habitual y caer en hábitos que los alejan de sus metas.
  6. Se enfocan mucho en las herramientas y no en los hábitos. Probablemente tienen la intención de mejorar y cada vez que encuetran una nueva técnica de ahorro o un nuevo software para presupuestos dicen que “esta vez sí!” lograrán su meta. Pero la novedad pasa rápido y eventualmente caen en los mismos patrones de conducta limitadores.
  7. Se enfocan mucho en reducir sus gastos y no en aumentar sus ingresos. Ahorran hasta el último centavo. Todos los gastos están fríamente calculados. Adoptan la frugalidad al máximo en nombre del ahorro. Sin embargo siguen en una situación limitada y no cumplen con sus metas. Dedican tanto tiempo y energía a estas actividades que se olvidan de potenciar sus fuentes de ingresos para crear riqueza.

¿Por qué buscar la paja en el ojo ajeno?

Porque es más fácil. Eso ya lo habíamos establecido antes. 😉

¿Conoces a alguna persona que cometa estos errores? ¿Tal vez la conoces muy de cerca? ¿tan de cerca que la ves todos los días… en el espejo?

Una vez que comienzas a notar el comportamiento en otras personas, puedes comenzar a buscar si esos comportamientos existen en tu vida. Además, sabrás que hay otras personas en situaciones similares y que pueden ayudarse mutuamente a mejorar (¡recuerda el error #5!).

Tú, ¿Qué tan dispuesto/a estarías a reconocer que cometes estos errores si un amigo tuyo te envió a leer este artículo? ¿O estarías dispuesto/a a reconocer que comentes estos errores después de saber que no estás solo/a?

¿Qué sigue?

Recién acabo de terminar la mitad de los 30 días publicando a diario en Economía Personal y ya estoy pensando en qué haré después.

Definitivamente, esta experiencia y a ha tenido un efecto permanente y no creo regresar a la frecuencia con que escribía antes. Pero no ecribiré todos los días de la semana como hasta ahora tampoco. Quiero encontrar un balance entre “el sitio está abandonado” y “necesito un teclado nuevo”.

Sin embargo, quiero hacer algún otro experimento que (1) sea una experiencia enriquecedora para todos —tú, yo, los otros lectores— y (2) que sea una experiencia que me ponga fuera de mi zona cómoda.

Tengo varias ideas en mente, pero para estar seguro de que se cumple la primera condición quiero contar con tu opinión.

¿Qué experimentos se te ocurren que pueda realizar por varias semanas que puedan beneficiarte a ti y a los demás lectores? Algunas de las cosas que he pensado:

  • ¿Has esuchado de todos esos sitios que dicen que te pagan “dinero fácil” por ver publicidad o que se supone que son negocios multinivel? ¿Es cierto? ¿Es una estafa? ¿Realmente vale la pena? Yo no se la respuesta a estas preguntas. Tengo mis sospechas, pero hay muchas personas que dicen que sí funciona y muchas que no funciona. Generalmente, cuando encuentro una discrepancia como esta, lo que prefiero hacer es probarlo yo mismo. (Asi fue como me volví 100% vegetariano). Así que se me ocurre probar algunos de estos sitios y reportar cada 2 o 3 días lo que vaya descubriendo para que todos aprendamos. Tengo la esperanza que con el tiempo que tengo de escribir en este sitio haya fomentado suficiente confianza como para que sepas que reportaré la verdad al 100%. Seré brutalmente honesto con lo que escriba.
  • Hay otros proyectos que me gustaría llevar a cabo dentro de Economía Personal. Similares al Directorio de Asesores Financieros que apenas tiene 2 días de existencia. Podría reportar los avances detalladamente sobre estos proyectos. Sin embargo, el problema es que esto sería interesante para quienes quieren comenzar sus propios negocios basados en la Web y no necesariamente son la mayoría de lectores de este sitio. ¿o sí? 🙂
  • Aparte de Economía Personal, tengo otras ideas de negocios que también podrían ajustarse a la idea del punto anterior.
  • Otra idea que tengo, es involucrar a algunos lectores que quieran participar en algun “reto público” de 30 días para aumentar sus ingresos o disminuir sus gastos de manera significativa. Los lectores reportarían sus experiencias (avances, obstáculos, nuevas ideas, etc.) y serían condensados en un artículo único para que todos sepamos en qué andan. Por supuesto, podría ser anónimo.

¿Tienes alguna otra idea? ¿O te gustaría participar en algún experimento como el que mencioné en el último punto? Comparte tu opinión en los comentarios abajo en TwitterFacebook o usando el formulario de contacto ¡Gracias!

Publicando Todos los Días

Probablemente habrás notado que en los últimos días he publicado un artículo diario. Un cambio drástico dada la frecuencia con que publicaba antes. 🙂

Hoy, aprovecharé para explicarte un poco el motivo por el que decidí hacer esto y cómo se relaciona esto con tu economía personal.

Ecuación de Derek

Derek Sivers es un músico/emprendedor más conocido por haber fundado CDBaby. Hace unos días publicó un artículo llamado “¿Cantidad + Aprendizaje = Calidad?” en el que relata la inspiración que él tuvo para comenzar a escribir todos los días en su blog. Es una historia sobre una clase de cerámica. Como está en inglés, aquí hay un breve resumen de la historia:

El maestro de la clase de cerámica decidió separar a sus estudiantes en dos grupos. El primer grupo, sería calificado en base a la cantidad de piezas que produjeran. Más piezas producidas = mejor calificación en la clase. El segundo grupo, sólo debería producir una pieza y sería calificado en base a la calidad de dicha pieza. Pieza perfecta = buena calificación.

Al final del curso, curiosamente, el grupo que produjo las piezas de mejor calidad fue el que estaba siendo calificado en base a cantidad.

Mientras el grupo que estaba siendo calificado en base a calidad pasó el tiempo pensando y planificando sobre cómo hacer una pieza perfecta, el otro grupo estaba produciendo piezas a gran velocidad aprendiendo de sus errores y cada vez aumentando la calidad de sus piezas.

Esta historia fue una de las motivaciones de Derek para comenzar a publicar algo todos los días en su blog.

Mi experiencia hasta ahora

Varias personas me han hecho comentarios, tanto públicos como en privado, acerca de la frecuencia con que publicaba artículos en Economía Personal. Para ser completamente honesto, el motivo por el que no publicaba tan frecuentemente era porque pasaba más tiempo pensando en como hacer un artículo perfecto, en lugar de correr el riesgo de publicar algo que no fuera perfecto. Como el grupo de la clase de cerámica que estaba siendo calificado por la calidad.

Esto puede sonar a que estoy comprometiendo la calidad del contenido que publico con tal de publicar todos los días, sin embargo, no lo veo así. ¿Por qué? Simplemente porque mientras más tiempo dejaba pasar entre cada artículo publicado, menos oportunidades tenía de aprender de tu opinión sobre lo que escribo. Y por lo tanto, tenía menos oportunidades de escribir artículos mejores y más útiles.

Decidí hacer un experimento radical y me comprometí a probar esta metodología por 30 días. Comencé a publicar a diario el 23 de junio por lo que finalizaré el 22 de julio. Al final de este período, evaluaré si continuaré con una planificación estricta como esta y evaluaré si la calidad de los artículos sufrió algún cambio. Seguramente haré una encuesta.

El efecto más evidente que he notado hasta ahora, es que he estado mucho más abierto a utilizar eventos cotidianos para escribir un artículo. Esto es algo que había evitado (principalmente con las noticias) porque mi opinión es que si el archivo de artículos de tu sitio, se basa en eventos pasajeros, con el tiempo tus artículos comienzan a perder validez. Mi idea es que el archivo de artículos de Economía Personal, siga proporcionando valor aún mucho después de haber publicado los artículos. Para contrarrestar el posible efecto de que los artículos pierdan valor, he decidido dejar claro de qué forma algún evento se relaciona con tu economía y finanzas personales.

¿Cómo se relaciona esto con tu Economía Personal?

¿Ves? 😉

La forma más evidente es que si tienes un blog cuyo propópsito es generarte ingresos, intentes aumentar la frecuencia de publicación. Siempre y cuando estés aprendiendo de tus errores, obtendrás frutos.

Si estás por iniciar un negocio, lo mejor es que empieces cuanto antes a proporcionar valor a tus posibles clientes aunque no tengas cubiertos todos los detalles que implica tener una empresa. ¿Realmente necesitas iniciar por comprar carpetas y papel con membrete? Aunque no tengas todavía el sistema completo que deseas crear para proporcionar el valor, mientras más veces te topes con un cliente real que te dé su opinión, más rápido podrás aprender a servirle mejor. Evita caer en “parálisis por análisis” y comienza a arriesgarte a cometer errores y a aprender de ellos.

Si eres empleado, también hay situaciones en las que puedes aplicar esta filosofía. Por ejemplo, si estás en una posición en la que puedes probar realizar cambios a la forma en que se hace algo dentro de tu empresa, inténtalo. Puede ser que algunas cosas no funcionen, pero habrás aprendido esa lección y estarás un paso más cerca de mejorar a tu empresa. Y probablemente tu jefe esté poniendo atención y te quiera dar un aumento por tu esfuerzo. Si no lo hace… quizás es hora de considerar otras opciones.

¿Quieres ayudarme?

Como mencioné antes, al final de este experimento haré una encuesta para saber si tú percibiste algún cambio (positivo o negativo). Pero si ya tienes alguna opinión al respecto, ¡mucho mejor! También sería útil si me envías ideas de artículos que te gustaría leer. Te invito a que dejes tus ideas en el área de comentarios. ¡Gracias!

Gastos Personales ¿Cómo controlarlos?

Este artículo es parte de la serie 7 reglas para llenar tus bolsillos, basadas en el libro El Hombre más Rico de Babilonia.

En el último artículo, hablé sobre cómo iniciar (o hacer crecer) tus ahorros. La clave para lograr eso es ahorrar 10% (o más) de tus ingresos y aprender a vivir con 90% (o menos) de tus ingresos. Pero, ¿cómo lograr controlar mis gastos para sobrevivir con 90% (o menos) de mis ingresos?.

La forma más directa de controlar tus gastos es utilizando un presupuesto.

Hay una infinidad de posibilidades para hacer un presupuesto. Puedes hacerlo tan sencillo o complejo como desees. Lo más importante es que tiene que ser un presupuesto que funcione para ti. Tiene que ser suficientemente sencillo para que sea fácil de usar, consultar y actualizar. Tiene que ser suficientemente completo para que refleje de la mejor forma posible la realidad de tus finanzas. No hay una sola “mejor forma” de hacer un presupuesto que aplique para todos. Sin embargo, hay algunos fundamentos que es bueno seguir para que tu presupuesto funcione. Puedes leer sobre estos fundamentos en este artículo.

Una vez que haz hecho tu presupuesto en papel, debes llevarlo a la práctica. Esto es algo que afectará directamente tu…

Estilo de Vida

Para muchos el obstáculo más grande para controlar sus gastos es el estilo de vida que llevan. Muchas personas no están dispuestas a sacrificar gastos innecesarios para poder vivir con el 90% de sus ingresos. Esto es común entre las personas a las que posiblemente escucharás diciendo “¿por qué ahorrar para el futuro si la vida es ahora? ¿no es mejor gastar el dinero ahora? De todas formas no estoy seguro de que vaya a estar vivo mañana, ¡hay que disfrutar la vida mientras se puede!”

Es completamente cierto, hay que disfrutar la vida mientras se puede; pero no es buena idea llevar esto al extremo. Hay un problema fundamental con llevar al extremo esta filosofía de vida. No puedes correr el riesgo de “vivir cada día como si fuera el último”. No puedes ir a gastarte todo tu dinero en alcohol y mujeres. Puedes tener la “mala suerte” de amanecer al día siguiente vivo, con resaca, sin dinero y con una esposa enojada. 😉

Existe un segundo grupo de personas que se resisten a un cambio en su estilo de vida. Este grupo de personas basa su estilo de vida en impresionar a otras personas con las cosas que compran. ¡Aunque tengan que endeudarse para hacerlo! Ropa de las mejores marcas, auto último modelo o cualquier otro juguete con el que puedan presumir. No quiero decir que estas cosas tengan algo de malo. Tienes todo el derecho de querer comprar juguetes caros. Pero si lo haces a costillas de la salud de tus finanzas, estás cavando un camino hacia una situación insostenible.

Finalmente, existe un tercer grupo de personas a quienes les resulta extremadamente difícil realizar un cambio de estilo de vida para ahorrar dinero. La mayoría de los lectores de este sitio, siendo latinoamericanos debe sospechar a quienes me refiero. Me refiero a las personas que viven en extrema pobreza. Lamentablemente, en latinoamérica esta todavía es una situación muy común.

Justamente hoy por la mañana tuve una conversación con alguien cercano que me hizo recordar que es difícil generalizar una regla como “guarda el 10% de tus ingresos” cuando tomas en cuenta los extremos. Vivir en extrema pobreza hace que sea casi imposible cumplir con una regla como esta. Es casi imposible darle vuelta a tu situación financiera cuando vives con lo mínimo. Pero la clave está en que es casi imposible, no imposible.

Esta última parte merece su tratamiento en uno (o varios) artículos aparte. Y dentro de las lecciones de El Hombre más Rico de Babilonia, hablaré más sobre este tema al llegar a la regla de “Aumenta tu capacidad de generar ingresos”

Mientras tanto, quisiera compartir una parte del libro que te ayuda a reflexionar sobre el uso de un presupuesto. Se trata de una comparación entre un presupuesto y…

La carga de un burro

Cuando Arkad, el hombre más rico de Babilonia, está describiendo cómo controlar los gastos de una persona uno de los alumnos se sobresalta, poniéndose a la defensiva porque no quiere hacer un presupuesto. El alumno dice que él es un hombre libre y que se rehúsa a convertirse en un “esclavo del presupuesto”. Él piensa que llevar y cumplir un presupuesto es una carga muy pesada, como los bultos de un burro de carga.

Arkad le responde con una pregunta: ¿quién haría tu presupuesto? ¿Si el burro pudiera escoger su carga, escogería lo más pesado? ¿o escogería balancear su carga con agua y alimentos para el viaje por el desierto?

El propósito del presupuesto no es privarte de cumplir tus deseos. El propósito es ayudarte a cumplir un objetivo más importante (tu libertad financiera) y proteger ese deseo mayor de tus caprichos casuales.

Conclusión

Esto es algo que ya he dicho antes, pero es importante así que no me importa repetirlo: Lo primero que tienes que tener claro antes de decidirte a controlar tus gastos (o tomar cualquier otra acción en relación a tus finanzas) es ¿cuál es el objetivo financiero que quieres alcanzar? sin esto, cualquier esfuerzo que hagas fácilmente se convertirá en un esfuerzo en vano. Si no sabes a donde vas, cualquier camino es bueno. O malo. Si sabes hacia donde vas, controlar tus finanzas tendrá sentido.

No le tengas miedo a un cambio de estilo de vida para ahorrar algo de dinero. Si tu objetivo es ahorrar dinero para obtener abundancia financiera en el futuro, el cambio de estilo de vida es sólo algo temporal.

El primer paso hacia la Libertad Financiera

“El dinero y el éxito no cambia a las personas; simplemente amplifica lo que ya existía.” – Will Smith

Acabo de leer un artículo de MSN Money acerca de 8 ganadores de lotería que han perdido sus millones. Algunos de los casos que menciona el artículo son:

  • Suzanne Mullins, ganó $4.2 millones. Ahora está hundida en deuda por un préstamo que pidió utilizando su premio como garantía.
  • Willie Hurt ganó $3.1 millones. Dos años después estaba en la quiebra. Su abogado dice que se gastó su fortuna en divorciarse y en cocaína.
  • Missourian Janite Lee ganó $18 millones. Donó a diferentes causas sociales (política, educación, desarrollo comunitario). Ahora está en la quiebra con sólo $700.

Tener mucho dinero no es lo mismo que tener Libertad Financiera. Tener Libertad Financiera va más allá. Se necesita tener un sistema que te permita cumplir tus objetivos, aprovechando al máximo tus recursos financieros.

Lo que dijo Will Smith tiene sentido. La situación de estas personas es una amplificación de las creencias y hábitos que ya tenían. Las creencias y hábitos son parte del sistema. De hecho, son la parte más importante.

Para poder tener un sistema de esta naturaleza es muy probable que tengas que realizar cambios en tu vida. Todos estos cambios inician en el mismo lugar: adentro. En tu mente. Y todos los grandes cambios requieren algo importante: el primer paso. El primer paso para llegar a la Libertad Financiera es cambiar por dentro. Cambiar tus hábitos y tus creencias acerca del dinero y del papel que juega en tu vida.

Es el paso más difícil. Pero también es el que tiene los efectos más duraderos. No cometas el error de tratar de aplicar soluciones rápidas a problemas fundamentales. Eso puede lograr cierto nivel de mejora, pero no algo radical como llegar a la verdadera Libertad Financiera.

Por ejemplo, puedes aprender 10 diferentes formas de hacer un presupuesto, pero si no tienes el hábito de revisarlo y actualizarlo constantemente, no sirve de nada.

Otro ejemplo: puedes aprender muchas formas diferentes de invertir tu dinero. Aprendes a seguir los precios de las acciones de una empresa. Aprendes a identificar oportunidades de negocios. Conoces gente que puede ayudarte. Pero no tienes dinero para invertir porque nunca has tenido el hábito del ahorro.

Y otro ejemplo: quieres tener millones en tu cuenta bancaria, pero piensas que la gente que ya los tiene es codiciosa y mezquina. Crees que es injusto que algunas personas tengan mucho mientras otras tienen muy poco. Crees que no puedes ayudar a personas pobres si estás lejos de su realidad porque eres millonario. Creencias como esas, no hacen más que mantenerte atrapado creyendo que no hay ninguna forma noble de cumplir con tu objetivo.

Intenta realizar este ejercicio sencillo para descubrir cuáles son tus creencias actuales acerca del dinero y la Libertad Financiera.

Toma un cuaderno y lápiz, o abre tu procesador de texto favorito, y responde a las siguientes preguntas:

  1. ¿Qué significa para mi el dinero? ¿Es un fin o un medio?
  2. ¿Para qué quiero el dinero? ¿Es realmente necesario tener dinero o la sociedad nos hace creer eso para hacernos esclavos del consumismo?
  3. ¿Qué significa Libertad Financiera? ¿Cómo sería mi vida si tuviera esa Libertad?
  4. ¿Qué hábitos necesito desarrollar para lograr mis objetivos, no sólo financieros sino los objetivos de mi vida en general?

Cuando estés respondiendo las preguntas debes ser completamente honesto contigo mismo/a. No debes responder lo que te gustaría creer, sino lo que verdaderamente crees en este momento. Si no sabes la respuesta, escribe eso. “No se“. De hecho, esa puede ser la respuesta más reveladora que obtengas sobre tus creencias y conocimientos actuales. Lo más importante es que una vez que hayas escrito una respuesta, sabrás exactamente qué debes hacer.

El principal objetivo de este sitio es ayudarte a lograr la Libertad Financiera y el objetivo de esta entrada es hacerte pensar sobre ti mismo/a. Es probable que al leer esta entrada y responder las preguntas del ejercicio te surjan ideas o preguntas. Me gustaría mucho que las compartieras con nosotros para poder ayudarte mejor a través del sitio.

En conclusión, el primer paso hacia Libertad Financiera es grabar en tu mente creencias útiles y potenciadoras. Y al mismo tiempo, desarrollar los hábitos y habilidades necesarias para manejar tus finanzas cuando tienes “poco”. Para poder amplificar tu vida cuando tengas “mucho”. Es mas fácil decirlo que hacerlo, pero con el hecho de tener claro cuál es el primer paso, ya recorriste la mitad del camino. Da el primer paso.